BARCELONA, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
Una jefa de estación del Metro de Barcelona acusada de apropiarse de títulos de transporte de forma ilícita ha negado los hechos, ha asegurado que siempre justificó las operación de cambio de billetes y solo ha admitido algún "error humano".
En un juicio por jurado en la Audiencia de Barcelona, que ha empezado este miércoles, la acusada ha defendido que todas las operaciones de cambios de billetes defectuosos --que según la fiscal le sirvieron para adueñarse de títulos de transporte-- fueron reales y se justificaron, y nunca los usó para expedir otros títulos.
La fiscal acusa a Teresa S.R., que fue despedida por estos hechos tras incoarle un expediente por falta muy grave, de un delito continuado de malversación de caudales públicos por 155 operaciones irregulares.
En su declaración en el juicio, la acusada ha detallado que todos los cambios de billete se deben justificar documentalmente y entregar en un sobre a la estación base al final del turno, y que las 155 operaciones presuntamente ilícitas eran correctas y fueron documentadas de este modo.
La acusada ha admitido que pudo incurrir en algún error humano normal: "Me pude equivocar alguna vez", ha subrayado ante los miembros del jurado.
Para ella pide tres años de cárcel, inhabilitación especial para cargo o empleo público por siete años, y que indemnice al Metro con 3.363,03 euros, el importe del perjuicio supuestamente ocasionado con la apropiación de los títulos de transporte.
Según la Fiscalía, como jefa de estación tenía entre sus facultades la de resolver los incidentes y proceder al cambio de títulos de transporte dañados y, entre noviembre de 2015 y octubre de 2016, obtuvo para sí títulos sin pagar su importe.
Para ello, se valió de la clave que tienen los trabajadores para solventar las incidencias con títulos de transporte defectuosos, en distintas estaciones de la Línea 1 de TMB, consiguiendo 155 títulos por un importe de 3.363,03 euros.
Según la Fiscalía, la acusada aprovechaba cuando un usuario le pedía ayuda al no funcionarle el título de transporte para, en lugar de expedirle solo un nuevo título, expedir dos y quedarse con uno, o también se expedía directamente títulos para sí fuera del horario de trabajo.
La defensa de la acusada ha asegurado, al inicio del juicio que la trabajadora nunca se adueñó ilícitamente de billetes de transporte y por lo tanto no cometió el delito del que se le acusa.