El bailarín argentino Julio Bocca encabezará de nuevo el jurado de la competición
BARCELONA, 10 May. (EUROPA PRESS) -
La octava edición del Certamen Internacional de Danza Ciutat de Barcelona reunirá a 80 jóvenes bailarines internacionales desde este jueves hasta el domingo en el Mercat de les Flors de la capital catalana, donde competirán en las categorías de danza clásica e internacional para conseguir becas, incorporaciones y estancias en las mejores escuelas y compañías de danza del mundo.
En rueda de prensa este jueves, la directora del certamen, la bailarina Georgina Rigola, ha destacado la importancia de la iniciativa, que pretende "ayudar a jóvenes bailarines con talento a cumplir su sueño" ya que cuenta con distintos premios como seis becas para estudiar en el centro Acosta Danza de Cuba, además de estancias en el Harid Conservatory de Estados Unidos junto a más de una decena de instituciones.
"Somos muy selectivos, siempre nos quedamos con los mejores", ha advertido Rigola, que ha explicado que los 80 bailarines participantes en la fase final del certamen son fruto de una selección de entre un centenar de aspirantes.
Ha detallado que este jueves y viernes tendrán lugar las eliminatorias previas, y que durante el fin de semana se celebrarán las semifinales y una gran final, en la que actuarán antiguos ganadores y entidades de prestigio como la compañía de danza de Taiwan.
Rigola también ha enfatizado el talento del jurado, que en esta edición volverá a estar encabezado por el bailarín argentino Julio Bocca, y contará con la presencia de los bailarines y directores Igal Perry, Helena Bayo, Mariaelena Ruiz, Jo Joo Hyun y José Luis Lozano.
Por su parte, Bocca ha reconocido la complicación de decidir qué bailarines deben ser merecedores de las becas, pero ha remarcado que "es muy gratificante, ya que ves a niños y niñas a quienes les estamos permitiendo que cumplan su ilusión de dedicarse a la danza".
"FALTA DE INVERSIÓN"
No obstante, Bocca ha lamentado que una ciudad como Barcelona no potencie la danza clásica ya que "tiene todos los equipamientos e instituciones para ello", y ha opinado que se debería ir más allá y colocar la danza en el primer plano cultural.
"Catalunya es una tierra de bailarines", ha reivindicado Rigola, que en 2008 fundó el certamen para potenciar esta cuestión, pero que también considera que las instituciones políticas deberían priorizar más esta disciplina.
A diferencia de otros países europeos, ha apuntado que "aquí no hay un interés político ni tampoco una cultura de la danza entendida como profesión ya que se acostumbra a llevar a los niños a bailar para que pasen el rato", y ha lamentado la falta de inversión de las administraciones públicas, especialmente la del Ayuntamiento de Barcelona, que hasta hace dos años acogía una entrega de premios del certamen.
Aun así, también ha reconocido que el consistorio les ha cedido algún espacio y que ha contribuido a difundir el festival a través de sus canales de comunicación: "Nosotros no lanzamos la toalla, a pesar de los impedimentos intentaremos llegar a los 10 años como mínimo", ha exclamado, y ha agradecido el apoyo del Institut Ramon Llull (IRL) a la hora de cederles el espacio para la rueda de prensa.
PREMIOS Y ACTIVIDADES PARALELAS
La responsable del certamen también ha explicado que en el marco del festival se entregará el premio BCN City Ballet, así como los Premis de la Dansa a Catalunya en un acto este jueves en el Reial Cercle Artístic de Barcelona.
Entre los premiados figurarán el Festival de Peralada y la bailarina Asunción Aguadé, así como el fallecido fotógrafo de danza Josep Aznar, que recibirá un reconocimiento póstumo un año después de su muerte.
También organizará distintas actividades en paralelo como una exposición en la Casa Mèxic de Barcelona --con imágenes del fotógrafo mexicano especializado en danza Carlos Quezada--, y una mesa redonda, entre otras.
