MADRID 15 Sep. (OTR/PRESS - Celia Gilpérez) -
Borja Thyssen tira la toalla. O eso se desprende de sus palabras, ya que el hijo de Tita se muestra desesperanzado ante una posible reconciliación con la baronesa y rehúsa a hablar más del tema, aunque denota tristeza cuando afirma que su madre aún no conoce al pequeño Eric. No obstante, él junto a su esposa Blanca Cuesta no se pierde una y se dejó ver en la Noche de la Moda de Madrid.
Ambos, que residen en Barcelona, se trasladaron a la capital española para asistir al evento y al concierto de Alejandro Sanz. Mientras sus dos hijos Sacha y Eric se quedaron con sus abuelos maternos con los que la pareja mantiene una excelente relación.
Blanca, que ya está recuperada totalmente de su embarazo, afirma en declaraciones a 'Diez Minutos' que sus pequeños son "muy buenos" y que el mayor, Sacha, no siente ningún tipo de celos por el recién llegado sino que al contrario, "le da besitos en el pie".
Respecto a sus proyectos de vivir en Madrid, Borja considera que están mejor en la Ciudad Condal. Además, preguntado por la relación con su madre, se muestra resignado y añade que Tita tiene "mucha manía" a Blanca y que los problemas derivan de la boda entre ambos. A pesar de ello, dice estar "muy feliz" de haber formado su propia familia.