PAULA PATTON Y ROBIN THICKE/GETTY
MADRID, 27 Ene. (CHANCE) -
Dos años después de hacer oficial su separación, un juez ha dictado una orden por la que prohíbe a Robin Thicke tener cualquier tipo de contacto con su ex mujer, Paula Patton, y el hijo de ambos, Julian, nacido en 2010. Según TMZ, el magistrado habría encontrado indicios de violencia doméstica inflingidos por la estrella musical.
La actriz de 41 años solicitó a los tribunales que despojaran al artista de la custodia temporal debido a un supuesto abuso físico contra el niño de seis años. Asimismo, la intérprete presentó una serie de documentos en los que acusa a su exmarido de haberla golpeado en varias ocasiones y de tener un grave problema con la cocaína. Patton asegura que su expareja, tras la separación y su intento de reconquista, organizó una fiesta en la casa familiar con seis mujeres desnudas.
El abogado de Robin presentó una declaración en la que asegura que el Departamento de Servicios para la Infancia y la Familia del condado de Los Ángeles está cerrando una investigación que determinó que estas acusaciones son "infundadas".
Sin embargo, el compositor y productor musical de 39 años deberá permanecer alejado 90 metros de su expareja y de su pequeño, y de la abuela materna, Joyce. Asimismo, el juez ha anunciado distintos procedimientos en los próximos tres meses para determinar quien obtiene la custodia del pequeño.