Adolfo Domínguez: "Jamás enjuicio y menos a mi Princesa"

Adolfo Domínguez
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Europa Press Chance
Actualizado: viernes, 23 abril 2010 14:50

MADRID 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

La madrileña gran Vía ha querido celebrar sus 100 años por todo lo alto. Por ello, este jueves la 'Cibeles Madrid Fashion Week' se trasladó de IFEMA a esta centenaria calle con el fin de llenarla de glamour, modelos y modistos de renombre. Entre ellos, destacó la presencia de Adolfo Domínguez, quien recibió un emotivo homenaje de este evento, 'Vive la moda'.

Este glamouroso evento, 'Vive la moda', que corrió de la mano de Movistar, no sólo celebró un homenaje a Adolfo Domínguez, sino que además ofreció desfiles de Roberto Verino, Ángel Schlesser y Juan Duyos.

Además, pudimos ver a la sensual Alicia de un País de las Maravillas lleno de transparencias y encajes de Sardá o los originales diseños del Delgado Buil, que meses antes habían presentado en la 'Cibeles Madrid Fashion Week'.

Sin embargo, el gran protagonista del evento fue el gallego Adolfo Domínguez. El diseñador se mostró muy 'feliz' con este emotivo homenaje, aunque declara: "Tampoco es que me homenajeen demasiado".

Tras una larguísima trayectoria en la moda en la que no sólo ha vestido a hombres y mujeres, sino también a "mascotas" y "niños", Adolfo sueña con que sus hijos y nietos mantengan vivo su pequeño imperio, aunque es consciente de que "la mayoría perecen y pocas cogen el relevo".

"Yo soy la antorcha de mis pequeños y espero pasársela a mis hijas", declara.

En cuanto a la elegancia, el gallego afirma que su mujer es la más elegante de España, mientras en el caso de los hombres, es el presidente de los Estados Unidos quien cuenta con la plena admiración del modista.

"Obama, a pesar de ser norteamericano, es la elegancia en todos los sentidos, una capacidad de seducción...", explica Adolfo Domínguez. "Habla de una manera bellísima. Es tan elástico, tan bellísimo y tan negrito. Hacía falta tener un presidente del mundo negrito".

Sobre cuyo estilo prefiere no comentar es el de la Princesa de Asturias. "Jamás enjuicio y menos a mi Princesa", termina Domínguez.

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