MADRID 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
La nueva colección de chapas y complementos de Conspiradoras lleva el nombre de
'Kitsch' y recupera el gusto por ese arte de lo vulgar, del quiero y no puedo, del altar
doméstico lleno de objetos en busca de una salvación bien sea en la simbología
espiritual, bien en el brillo o la ostentación.
En todo caso es el arte de huir del vacío y la soledad, rememorando a esas abuelas burguesas con las casas abarrotadas de souvenirs, y de falsos lujos que resultan un reflejo perfecto, en clave de humor, de los tiempos que corren.
Un poodle, un gato japonés, un buda, un pavo real, un enano de jardín, una muñeca
flamenca, unos pajaritos de colores, un bambi de peluche, un pavo real, toda una
tendencia que entre tonta y pedante, resulta sencillamente encantadora.
Para realizar esta colección, Conspiradoras ha utilizado vidrio facetado, ante, encaje,
tul, cinta gros grain, cinta de raso, cinta antelina, latón, madera, y encaje de bolillos.