Cuestionan la existencia del sistema de estrellas del 'cinturón de Gould'

Actualizado: jueves, 6 agosto 2009 18:23

MADRID, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -

Un estudio en el que participan investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha puesto en cuestión si, según la teoría más aceptada, el 'Cinturón de Gould' un sistema de estrellas de unos 3.000 años luz de diámetro que rota sobre sí mismo y se expande y es sólo es visible desde el Hemisferio Sur de la Tierra. Sin embargo, sus autores sugieren que, en realidad, se trata de una "alineación transitoria de dos grupos de estrellas fundidos en un único cuerpo por el punto de vista del ser humano".

Según informó este organismo, la investigación revela que dicha estructura "no reúne las condiciones para formar un sistema de estrellas en sí mismo". "Nuestro trabajo se basa en la idea de que la formación es producto de la tendencia humana a ver un triángulo donde sólo hay tres puntos", explicó recientemente el experto del Instituto de Astrofísica de Andalucía, Emilio Alfaro. Además, señaló que el descubrimiento del cinturón "respondería al mismo fenómeno que originó las constelaciones".

En este sentido, del estudio se desprende que ya las antiguas civilizaciones "trazaron líneas imaginarias entre estrellas próximas hasta formar figuras con las que componer la bóveda celeste". "El cinturón de Gould, según los resultados que hemos hallado, sería una superconstelación, producto de nuestra visión todavía antropogénica y localista del Universo", añadió Alfaro.

Para determinar su existencia, los autores analizaron los 'cúmulos abiertos jóvenes', agrupaciones de entre decenas y miles de estrellas nacidas de una misma nube de gas en el sistema, según señaló el consejo. Las teorías de formación estelar afirman que las estrellas nacen a partir de enormes nubes de gas, cuya contracción y colapso va generando poblaciones estelares como los cúmulos abiertos; sin embargo, el investigador apuntó que su equipo partió de la hipótesis de que, si éste fuera un sistema coherente, "debería mostrar una distribución más o menos uniforme en sus dos regiones dominantes".

UN FENÓMENO CASUAL

Así, sus observaciones confirmaron "justo lo contrario", pues mientras que la región de Orión es "rica en cúmulos", el extremo de Orión y Escorpión-Lobo-Centauro presenta una densidad "casi nula" de este tipo de objetos. "Todo ello apunta a que estas dos regiones de formación estelar han tenido un origen diferente y que su posición actual, en la que parecen formar un único sistema, es sólo un fenómeno transitorio y casual", concluyó Alfaro.

El fenómeno, que fue descubierto en 1874 por el astrónomo inglés John Herschel, ha sido objeto de "numerosos" trabajos de análisis de su estructura y movimiento, así como de diversas teorías sobre su origen. En este sentido, la opinión "más asentada" lo identifica como un disco de gas y estrellas, con una masa un millón de veces mayor que la del Sol, situado entre dos grupos de estrellas "bien definidos"; el de Orión, en su extremo sur, y la asociación Escorpión-Lobo-Centauro, en el norte.