ADN revela vínculo íntimo entre cazadores-recolectores y agricultores

Reconstrucción facial de restos de los que se extrajo el ADN antiguo
SERRULLA, F., AND SANÍN, M. (2017)
Actualizado: jueves, 25 mayo 2017 16:34

   MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -

   Una nueva investigación muestra que, por lo menos, en el área que ahora conocemos como Rumanía, cazadores-recolectores y agricultores vivían unos junto a otros, mezclándose entre sí y teniendo hijos.

   En la historia de la humanidad, la transición de la caza y la recolección a la agricultura es significativa. Se piensa que los cazadores-recolectores y los granjeros eran dos grupos enteramente diferentes de personas.

   "Esperábamos un cierto nivel de mezcla entre los agricultores y los cazadores-recolectores, dada la evidencia arqueológica de contacto entre estas comunidades --afirma Michael Hofreiter, de la Universidad de Potsdam, en Alemania--. Sin embargo, estábamos fascinados por los altos niveles de integración entre las dos comunidades como reconstruimos a partir de nuestros datos de ADN antiguo".

   Los hallazgos a raíz de nuevas pruebas de ADN --revelados en un artículo que se publica en 'Current Biology'-- aportan evidencia a un largo debate sobre cómo se produjo realmente la transición del Neolítico, cuando las personas dejaron la caza y la recolección por la agricultura, dicen los investigadores. En esos debates, el punto de discusión ha sido a menudo acerca de si el movimiento de personas o el movimiento de ideas impulsaron la transición.

   La evidencia anterior sugirió que la transición neolítica en Europa occidental ocurrió sobre todo a través del movimiento de la gente, mientras que la difusión cultural desempeñó un papel más grande al este, en Letonia y Ucrania. Los autores del nuevo estudio estaban interesados en Rumanía porque se encuentra entre estas dos áreas, presentando algunas de las pruebas arqueológicas más convincentes para el contacto entre los agricultores que llegaron y los cazadores-recolectores locales.

   De hecho, los nuevos hallazgos muestran que la relación entre cazadores-recolectores y agricultores en la cuenca del Danubio puede ser más matizada y compleja. El movimiento de las personas y la difusión de la cultura no son ideas mutuamente excluyentes, señalan los investigadores, "sino simplemente los extremos de un continuo".

   Los investigadores llegaron a esta conclusión después de recuperar cuatro antiguos genomas humanos de Rumanía que abarcan un periodo de tiempo entre hace 8.800 años y 5.400 años. Los investigadores también analizaron dos genomas mesolíticos (cazadores-recolectores) de España para proporcionar un contexto más amplio.

ADN ANTIGUO REVELA MÚLTIPLES MEZCLAS

   El ADN reveló que los genomas rumanos de miles de años atrás tenían ascendencia significativa de los cazadores-recolectores occidentales, aunque también tuvieron una contribución menor pero aún importante de los agricultores de Anatolia, lo que sugiere múltiples mezclas entre cazadores-recolectores y agricultores. Un análisis de los huesos demostró que comían una dieta variada, con una combinación de fuentes terrestres y acuáticas.

   "Nuestro estudio muestra que tales contactos entre cazadores-recolectores y agricultores fueron más allá del intercambio de alimentos y artefactos --subraya Hofreiter--. A medida que los datos de diferentes regiones se acumulan, vemos un gradiente en toda Europa, con una creciente mezcla de cazadores-recolectores y agricultores a medida que avanzamos hacia el este y el norte".

   "Aunque todavía no conocemos los motores de este gradiente, podemos especular que se enfrentaron a condiciones climáticas más difíciles, comenzaron a interactuar más con los cazadores-recolectores locales y estos contactos crecientes, también evidentes en el registro arqueológico, llevaron a la mezcla genética, implicando un alto nivel de integración entre personas muy diferentes", explica.

   Los resultados son un recordatorio de que las relaciones dentro y entre las personas en distintos lugares y en diferentes momentos no son simples. A menudo se dice que los agricultores llegaron y superaron a los cazadores-recolectores con poca interacción entre los dos, pero la verdad es seguramente mucho más rica y variada que eso. En algunos lugares, como muestra la nueva evidencia, los agricultores entrantes y los cazadores-recolectores locales interactuaron y se mezclaron en gran medida, viviendo juntos a pesar de las grandes diferencias culturales.

   Entender las razones de por qué las interacciones entre estas diferentes personas llevaron a resultados tan variados, dice Hofreiter, es el siguiente gran paso. Los investigadores esperan usar pruebas de ADN antiguo para agregar más capítulos a la historia mientras exploran cómo ocurría la transición neolítica en otras partes del mundo, fuera de Europa.