MADRID, 3 Ene. (EUROPA PRESS) - Los científicos habían teorizado durante mucho tiempo que la duración de la incubación de dinosaurios era similar a las aves, cuyos huevos eclosionan en períodos que van desde 11-85 días. Los huevos reptilianos de tamaño comparable tardan típicamente dos veces más, entre semanas a muchos meses. Debido a que los huevos de los dinosaurios eran tan grandes -algunos eran de unos 4 kilogramos- los científicos creían que debían haber experimentado una rápida incubación, como las aves que heredaron esa característica de sus ancestros dinosaurios. Erickson y su equipo se centraron en las mandíbulas embrionarias a través de un escáner de TC para visualizar la dentición en formación. Luego, extrajeron varios de los dientes para examinarlos más a fondo bajo microscopios sofisticados. Los investigadores encontraron lo que estaban buscando en los portaobjetos del microscopio. Líneas de crecimiento en los dientes mostraron a los investigadores precisamente cuánto tiempo habían estado creciendo los dinosaurios en los huevos. Sus resultados mostraron casi tres meses para los pequeños embriones de Protoceratops y seis meses para los del gigante Hypacrosaurus. La incubación prolongada pone a los huevos y a sus padres en riesgo de los predadores, el hambre y otros factores de riesgo ambientales. Y las teorías de que algunos dinosaurios anidaron en la latitud inferior más templada de Canadá y después viajaron al ártico durante el verano ahora parecen inverosímiles dado el marco de tiempo para la eclosión y la migración. "Sospechamos que nuestros hallazgos tienen implicaciones para entender por qué los dinosaurios se extinguieron al final del período Cretáceo, mientras que los anfibios, aves, mamíferos y otros reptiles lo lograron y prosperaron", dijo Erickson.