Innova.- Diseñan un vehículo urbano eléctrico adaptado a las necesidades de las personas mayores

Actualizado: domingo, 5 julio 2009 16:28

VALENCIA, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV) está participando en el diseño un nuevo concepto de vehículo urbano eléctrico --Urban Car--, de peso reducido. siguiendo criterios de movilidad urbana sostenible y orientado a las necesidades actuales de las personas mayores, según informaron fuentes de la Generalitat en un comunicado.

En este proyecto, que ha sido cofinanciado por el Fondo europeo de desarrollo regional a través del Instituto de la Mediana y Pequeña Industria Valenciana (Impiva), junto al IBV, participan el Centro de Investigación de Tecnología de Vehículos y el Departamento de Ingeniería Electrónica de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) así como el instituto tecnológico del plástico (Aimplas).

La iniciativa se ha desarrollado utilizando las técnicas más novedosas de ingeniería emocional para conseguir diseñar un producto final que refleje las preferencias, hábitos de uso, necesidades y expectativas de los usuarios finales.

Esas técnicas van desde estudios ergonómicos, hasta los análisis de tendencias, paneles de usuarios, context-mapping y estudios cuantitativos. El IBV presentó esta iniciativa en el pasado Salón del Automóvil de Barcelona, donde se expuso la maqueta resultado de este proyecto

Urban Car representa el "vehículo urbano del futuro" que destaca por tener sus dimensiones muy compactas --mide 3.2 metros-- pensadas para el tráfico urbano, un habitáculo con capacidad para cuatro personas y asientos traseros modulables para habilitar espacio como maletero. Sus dos puertas correderas permiten el acceso en los aparcamientos más ajustados y su techo acristalado, que aumenta la visibilidad, provoca mayor sensación de espacio y facilita la conducción.

Uno de los aspectos "pioneros" y "relevantes" de este nuevo coche es que, tanto en la elección de la línea del diseño exterior como en la distribución de espacios del diseño interior, se ha tenido en cuenta a la opinión de los que serán los usuarios finales, según aseguraron desde el Consell.

El proyecto ha estudiado qué demandan los usuarios de los coches eléctricos: estos requieren coches que tengan baterías con una autonomía de 125 kilómetros y de dos a tres horas de tiempo de carga aunque se podría aceptar una autonomía de hasta 80 kilómetros y mayor tiempo de carga que reduciría su precio de forma importante. Las baterías concebidas son extraíbles ofreciendo una mayor flexibilidad al poder intercambiarlas y mantener la autonomía del vehículo.

Además, en el diseño de Urban Car se ha evaluado qué piezas de metal se pueden sustituir por nuevos materiales plásticos más ligeros y así reducir el peso del vehículo. En este apartado, también se ha investigado cómo sería recibido por los usuarios en su percepción de seguridad. Un dato relevante es que, en este sentido, las mujeres confían más en los nuevos materiales que los hombres.

El proyecto, que consta de una segunda fase en la que se validará el diseño y se concretarán nuevas características, ha sido apoyado por la Red Tecnológica de Automoción y en él participan centros que forman parte del Centro en Red de Ingeniería del Automóvil de la UPV.