VALÈNCIA 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
El 74,5% de la población de la Comunitat Valenciana tiene diagnosticada alguna alteración visual: El 39% son miopes, el 12,6% hipermétropes, un 32,5% de la población tiene astigmatismo, y la presbicia o vista cansada afecta al 28,8%.
Así, se desprende del Barómetro de la Salud Visual de la población de la Comunidad Valenciana 2025 impulsado por el Colegio de Ópticos-Optometristas de la Comunitat Valenciana (COOCV) y supervisado por la Sociedad de Optometría y Contactología de la Comunitat Valenciana (SOCCV).
Se trata del estudio más amplio realizado en la Comunitat Valenciana para tener un conocimiento más preciso del estado de la salud visual de su población y para el que se han encuestado a 1.000 personas de entre 14 y 75 años, según la entidad colegial.
Por provincias, el 72,9% de los alicantinos presenta alguna alteración visual, una cantidad que asciende hasta el 75,4% de los castellonenses y en la provincia de Valencia se sitúa un punto por encima de la media con el 75,5% de la población.
Por ello, el presidente del COOCV, Andrés Gené, recalca que las revisiones visuales periódicas son "fundamentales" para "la detección precoz y el tratamiento eficaz de las alteraciones visuales". Los ópticos-optometristas ayudamos a ver el mundo mejor", ha subrayado.
Por su parte, el presidente de la SOCCV, Rafael Pérez, ha destacado que este estudio ofrece "una información precisa y actualizada de la prevalencia de alteraciones visuales en la población valenciana, con el objetivo de concienciar a la ciudadanía y a los profesionales sanitarios sobre la importancia de la prevención, la detección temprana y el tratamiento adecuado de los problemas visuales".
MIOPÍA, A LA CABEZA
La miopía es la alteración visual más prevalente entre los habitantes de la Comunidad Valenciana y la sufren un 39% de los ciudadanos. En la actualidad la miopía se ha convertido en un grave problema de salud pública y según la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya es la pandemia del Siglo XXI.
Gené ha explicado que aunque "se sigue investigando, las causas de la miopía no se conocen del todo". No obstante, la genética, las horas de trabajo con visión de cerca y el poco tiempo al aire libre son algunos de los factores de riesgo identificados.
Por edades, son los milenials (entre 31 y 43 años) los que más sufren este defecto visual con un 42,5%, seguidos de la Generación X (de 44 a 55 años) que alcanzan un 41,6%. En tercer lugar, se encuentra sorprendentemente la Generación Z (entre 14 y 30 años) con un 40,2%, y por último, con un porcentaje por debajo de la media, los Baby Boomers (entre 56 y 75 años), con un 33,3%.
Por sexos, un 42,3% de las mujeres son miopes, mientras que entre los hombres la cifra baja hasta el 35,6% Por provincias, Castellón está a la cabeza con un 42,9% de miopes, seguida de Valencia con un 38,9% y en tercer lugar, Alicante con 37,9% de la población.
Sin embargo, a pesar de que la incidencia de la miopía no deja de crecer, el 53,9% de la población no conoce ningún tratamiento para el control o freno de esta alteración visual cuando en la actualidad es posible ralentizar y controlar la miopía.
Entre los tratamientos, se encuentra el uso de gafas con lentes oftálmicas de desenfoque periférico; lentes de contacto de desenfoque miópico periférico; las lentes de contacto Orto-k moldean la córnea durante las horas de sueño y permite una visión nítida durante el día sin gafas ni lentillas o medidas farmacológicas como la aplicación diaria de gotas de atropina que deben ser prescritas por un oftalmólogo.
INICIO DE LOS PROBLEMAS VISUALES
Los encuestados señalan, según el estudio, que comenzaron a notar los primeros problemas visuales a la edad de 38,5 años, unos cambios de la visión relacionados con la edad que ha obligado al 44,1% de la población a realizar algún ajuste en diferentes actividades diarias como la lectura o la conducción. En este sentido, el 86,8% de los encuestados consideran que una visión deficiente influye directamente en su bienestar general o afecta a su trabajo o estudios
Las gafas son la solución más común para la compensación de defectos de refracción y el 57% de la población las utiliza, mientras que el 1,9% utiliza únicamente lentes de contacto y un 15,4% ambas. No utilizan gafas ni lentillas el 25,7% de los encuestados.
Entre las enfermedades oculares, las cataratas son las más prevalentes y afectan al 5% de la población, mientras que, el 3,2% sufre Degeneración Macular Asociada a la Edad, un 1,4% retinopatía diabética y un 1,3% glaucoma.
En la Comunitat Valenciana ejercen 2.500 ópticos-optometristas y se realizan más de tres millones de consultas resolutivas anuales de atención visual. Actualmente solo 32 ópticos-optometristas trabajan en diez departamentos de salud de la Sanidad Pública en la Comunitat Valenciana, cifra "claramente insuficiente" para la labor sanitaria que pueden desarrollar ya que, según datos del Colegio, actualmente harían falta 200 profesionales an la red pública.