El barrio vive hoy una jornada tranquila con una concentración de vecinos sin incidentes

Actualizado: viernes, 9 abril 2010 21:00

VALENCIA, 9 Abr. (EUROPA PRESS TELEVISIÓN) -

El barrio del Cabanyal de Valencia vivió hoy una jornada tranquila después de los incidentes registrados estos días entre la Policía y vecinos contrarios a la ejecución del Plan Especial de Protección y Reforma (PEPRI) y tan sólo se celebró una concentración de representantes de la plataforma Salvem el Cabanyal y otros ciudadanos.

Así, numerosos vecinos se concentraron hoy ante un inmueble pendiente de derribo para proteger la casa en una jornada en la que, sin embargo, no se produjo ninguna demolición.

En la concentración se encontraban también las dos personas que fueron detenidas ayer, acusadas de desorden público y desobediencia en la autoridad, y que fueron puestas en libertad por la noche. Se trata de Gabriel Fariza y su hijo, que fueron detenidos tras subirse a una de las máquinas excavadoras "para tratar de pararla".

Fariza, que trabaja de payaso en un teatro infantil ubicado en el Cabanyal, comentó a los medios que "con 20 años padeció los calabozos franquistas" y desde entonces, dijo, "no conocía una represión tan brutal como la de ayer".

Este vecino afirmó que tiene su negocio familiar en el barrio, y que sus hijos también trabajan en él. "Es nuestra vida, y cómo no vamos a defender eso", se preguntó.

Los vecinos comenzaron a concentrarse sobre las siete de la mañana en el barrio. Según explicó la portavoz de Salvem el Cabanyal, Maribel Doménech, ayer tenían noticia de que podría producirse un último derribo en la calle San Pedro 33, por lo que esta mañana se reunieron los vecinos "para seguir protegiendo esta última casa".

"Sin embargo, nos hemos encontrado con mucha alegría que no había grúas en el barrio, ni policías, y que había tranquilidad, por lo que nos hemos sentido muy felices", agregó.

Por su parte, otro representante de la plataforma, Faustino Villora, señaló que continúan con sus acciones de defensa de las casas porque están "absolutamente convencidos" de que tienen la razón. "Tenemos la razón de la legalidad y la razón moral", dijo.

Asimismo, comentó que no pueden dejar de hacer lo que están haciendo porque si no, "estaríamos convirtiéndonos en vasallos, que es lo que quieren".