ALICANTE (EUROPA PRESS)
Cruz Roja ha atendido en lo que llevamos de enero a 432 personas en la provincia de Alicante en diferentes recursos de emergencia movilizados con motivo de las bajas temperaturas, que recrudecen la realidad en la que viven las personas sin hogar, según ha informado la organización.
Café caliente, comida, abrigo, materiales de aseo e higiene, atención sanitaria y escucha, mucha escucha y acompañamiento son las principales respuestas de los equipos que componen las Unidades Móviles de Cruz Roja en sus labores de apoyo a las personas que viven en la calle.
El proyecto de atención a personas en situación de extrema vulnerabilidad se lleva a cabo gracias al trabajo de 19 oficinas locales de Cruz Roja en la provincia y cuenta con el apoyo de un centenar de voluntarios que proporcionan acompañamiento, apoyo logístico, distribución y transporte de personas.
Durante el 2018, Cruz Roja en la provincia de Alicante atendió a 1.200 personas sin hogar (dos de cada diez de estas personas son mujeres).
En total, en 2018 se realizaron 13.400 intervenciones socio sanitarias con estas personas (en ayudas de alojamiento, capacitación y asistencia socio sanitaria, entre otras). La labor de Cruz Roja con estas personas contempla también ayudas de entregas de bien de productos alimentarios, higiene, vestuario y sanitarios. Se han realizado un total de 12.000 entregas de este tipo, lo que suma más 25.300 intervenciones asistencias a las personas sin hogar.
REFUERZO
Ante la bajada de las temperaturas Cruz Roja ha reforzado su programa de Atención Integral a Personas Sin Hogar a través de recursos de emergencia activados, en coordinación con los diferentes ayuntamientos, en diferentes localidades de la provincia. La organización colabora activamente con los planes y protocolos para personas sin hogar que se ponen en marcha por parte de las diferentes administraciones en estas épocas del año.
De este manera, en varias ciudades, Cruz Roja ha habilitado 'espacios de calor' o 'alojamientos de urgencia por frío' en dependencias propias o municipales, para que las personas sin hogar tuvieran un refugio temporal, o 'puntos de encuentro', espacios de acceso informal para las personas sin hogar, sin necesidad de cita u otros requisitos.
"Las personas sin hogar viven numerosas situaciones donde ven comprometida su integridad física y psíquica, y sufren graves vulneraciones de derechos como consecuencia de vivir en la calle, como el derecho a la intimidad o a la seguridad personal, entre otros. Especialmente dura es la situación que sufren las mujeres sin hogar, más expuestas a episodios de violencia, abusos, discriminación o falta de adaptación de los recursos existentes a sus necesidades" ha destacado la responsable nacional del programa de Personas sin Hogar de Cruz Roja, Almudena Echevarría.
"Estas medidas de refuerzo son necesarias en estos momentos; sin embargo, no podemos olvidar que las necesidades de estas personas especialmente vulnerables siempre, persisten durante todo el año", ha recordado Echevarría