Miró detecta "algún interés en crear mala imagen" al Museo de Bellas Artes
VALENCIA, 26 May. (EUROPA PRESS) -
En el Museo de Bellas Artes San Pío V de Valencia no hay "ninguna obra que haya perdido la más mínima partícula de pigmento", según aseguró hoy la directora del Institut Valencià de Restauració i Conservació de Béns Culturals (Ivacor), Carmen Pérez, quien explicó que las tablas que custodia el centro experimentan "movimientos como en casi todos los museos" que atribuyó a que son "seres vivos" que se ven afectados por las variaciones climáticas.
Pérez realizó estas declaraciones a preguntas de los medios sobre los motivos de la retirada de la Sala Gótica de la pinacoteca del retablo 'El Juicio Final con San Miguel' en el acto de presentación del lienzo 'Martincho desde la mesa', en el que también estaban presentes la consellera de Cultura, Trini Miró, el director del centro, Fernando Benito, y el restaurador Julián Almirante.
Este último detalló que la pieza retirada fue restaurada en 1992 con la colaboración de la National Gallery de Londres y la dirección de Anthony Reeve. El experto agregó que la tabla sufrió un ataque de xilófagos por lo que tiene "movimientos constantes". Por ello, continuó, "se hizo una primera fijación cuando hubo unos pequeños problemas en el museo y a los dos años volvió a moverse". Ahora se procederá a radiografiarla para tratarla durante nueve o diez meses.
Por su parte, Carmen Pérez recalcó que ese movimiento "lo sufren las tablas aquí y en casi todos los museos, puesto que son seres vivos y cualquier variación climática y las hay muy fuertes en Valencia". En este sentido, hizo notar que el año pasado fue "tremendamente complicado con unas valoraciones de humedad muy diferentes a las que normalmente registra la ciudad".
Pérez opinó que esto no tiene por qué influir "negativamente", ya que actualmente el museo cuenta con 12 restauradores que revisan las obras todos los lunes y "siempre están al quite para detectar cualquier craquelado". En este punto, aclaró que los papeles "no se ponen en las obras cuando se pierde la pintura sino cuando existe una intuición, es decir, previamente". Por ello, insistió en que la pinacoteca y sus fondos están "cuidadísimos" y reiteró que "en absoluto hay ninguna obra que haya perdido la más mínima partícula de pigmento".
Por su parte, la consellera Trini Miró consideró que existe "algún interés en crear mala imagen al museo" --opinión compartida por Fernando Benito, según expresó el director--, una circunstancia que dijo "no entender porque se trata de un centro público que está para el disfrute de todos los ciudadanos".
"TOTAL NORMALIDAD"
La titular de Cultura lamentó que "se confunda a la opinión pública" y recordó que recientemente se celebró un patronato en el que se dieron las explicaciones oportunas y en el que estuvo presente la representación del Ministerio de Cultura, por lo que hay "total normalidad", subrayó.
Tras aquella reunión del patronato, desarrollada el 12 de mayo, se informó de una avería detectada en una máquina enfriadora recuperadora de la pinacoteca que será repuesta en junio y se recalcó que, no obstante, esa máquina tiene un rendimiento actual de un 60 por ciento, por lo que "se mantienen los parámetros estables en todas las salas del museo para la conservación de las obras".
