VALENCIA, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
La defensa de la exconsellera de Turismo Angélica Such ha solicitado la absolución de su clienta porque, en su opinión, el fiscal "tiene dudas de su culpabilidad" porque durante su exposición de los hechos supuestamente delictivos en la causa "en dos ocasiones dijo a la sala que si se equivocaba se le corrigiese". Por ello, el letrado ha concluido que existe, por parte del ministerio público, una "falta de convicción total en la incriminación" de la exresponsable de Turismo.
El abogado de Such ha defendido de esta forma a su clienta este martes en una nueva sesión de la causa en la que se juzgan las adjudicaciones de los stands de la Comunitat Valenciana en Fitur entre los años 2005 y 2009 en una pieza separada del 'caso Gürtel'.
El letrado ha manifestado que detectó en el escrito de acusaciones del ministerio público una "falta de convicción en los hechos en los que se basa". Además, ha destacado que, en el texto, el fiscal dice que "había una cantidad menor de irregularidades en los años de Such al frente de la Conselleria que en los anteriores", en los que la titular era Milagrosa Martínez e indicaba la presencia "de irregularidades, no de ilegalidades".
"NINGÚN TIPO DE RELACIÓN"
La defensa de Such ha asegurado que ésta "no tuvo ningún tipo de relación con ninguno de los acusados en la causa" y ha subrayado que el fiscal sitúa el 28 de junio de 2007 el primer contacto entre la red 'Gürtel' y la exconsellera y "previamente ya se había firmado la orden de inicio del proceso de adjudicación de los stands de Fitur".
Uno de los hechos en los que el fiscal se basa para demostrar la relación entre Such y los cabecillas de la trama es en las anotaciones de una agenda en la que aparecen reuniones entre ambos y, sobre esto, ha sostenido que existen "dos agendas diferenciadas", la de su clienta y la de la entonces secretaria autonómica de Turismo, Victoria Palau.
Al respecto, ha indicado que "el fiscal dice que las reuniones que aparecen con los responsables de Orange Market --la firma que se hizo con los montajes de los stands de la Comunitat en la feria de turismo-- son de Such pero si se cotejan ambas agendas se puede ver que no coinciden" y la exconsellera "no las tiene anotadas", según ha comentado. En este sentido, se ha preguntado: "¿Con qué agenda nos guiamos?".
El abogado ha asegurado que dichas reuniones "no se celebraron" y su defendida testificó que "no recuerda a Pérez hasta la misma celebración de Fitur". Además, ha afirmado que en las conversaciones intervenidas, los acusados "se refieren a ella como 'la de Turismo', no conocen ni su nombre y el fiscal quiere convencernos de que tienen una estrecha relación". "Además --ha continuado--, la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) dice en sus informes que no hay pruebas de que se le haya regalado nada".
"UNA VIDA NORMAL"
Sobre la acusación de prevaricación, ha afirmado que es "imposible" probarlo y ha criticado que "en las grabaciones se cuentan las cosas a medias, son erróneas y llevan a conclusiones que no se corresponden con la realidad". "Such asume su responsabilidad como consellera y firma los expedientes pero el seguimiento de las adjudicaciones no le corresponde; en cada expediente han participado entre 15 y 20 personas", ha añadido en lo referido a este cargo.
En cuanto a la acusación de asociación ilícita que el ministerio público añadió la pasada semana, en la recta final del proceso, ha defendido que no se les ha dicho "cuándo Such entra a formar parte de este entramado", por lo que no han podido defenderse.
Finalmente, el letrado ha efectuado un ruego al tribunal en el que ha pedido que la sentencia que dicten permita a Such "seguir con su vida normal, que se vea reparada y que en el futuro pueda hablar con sus hijos y les pueda decir que este proceso fue justo".
