Cartel de 'Ciutarts: Valencia, de puertas abiertas al acogimiento' - REMITIDA ORGANIZACIÓN
VALNCIA, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de una treintena de jóvenes --entre alumnos de Bachillerato, menores tutelados y niños refugiados procedentes de Ucrania-- participarán en Valncia en una actividad socioeducativa que pretende "demostrar que otra educación y que otro mundo son posibles" y que el alumnado "tiene mucho que decir a favor de la diversidad y la paz".
Así, bajo el lema 'Ciutarts: Valencia, de puertas abiertas al acogimiento', el próximo martes, 3 de mayo, desde las 16. 30 hasta las 19.30, se desarrollará este encuentro en el que participan centros educativos, de acogida de menores y de la sección del IES conselleria con el Centro Específico de Educación a Distancia de la Comunitat Valenciana (CEEDCV) y entidades sin ánimo de lucro.
Los alumnos de Bachillerato se encargan de ofrecer este proyecto de aprendizaje-servicio dirigido a los menores que, en situación de vulnerabilidad, están tutelados por la Conselleria de Igualdad y a cargo de la Fundación Diagrama. En concreto, participarán cuatro centros de Gátova, Torrent, Llosa de Ranes y Valncia.
También serán destinatarios del servicio cultural, un grupo de niños refugiados de la guerra en Ucrania, cuyo acogimiento ha gestionado la Fundación Juntos por la Vida.
La actividad se plantea como una ruta cultural circular que discurrirá desde la plaza de San Sebastián hasta las Torres de Serranos, pasando por las Torres de Quart, el Asilo del Marqués de Campo, el Convento del Carmen i la Font dels Xiquets; y de vuelta, hasta el umbracle del Jardí Botnic, pasando por las murallas musulmanas, el Portal de la Valldigna y la capilla de la Antigua Casa de la Misericordia.
Este itinerario pone "especial acento en las tres puertas de la ciudad que se conservan, como metáfora de apertura al exterior y a lo foráneo", explican a Europa Press las impulsoras de la iniciativa, que también subrayan "la larga tradición histórica del barrio del Carmen en la obra benéfica y social".
En las paradas del recorrido, el alumnado de Bachillerato del CEEDCV compartirá con los menores en situación de acogimiento lo que ha aprendido y lo que sabe hacer: desde explicar y poner en valor dichos bienes patrimoniales de la ciudad hasta interpretar piezas musicales con instrumentos como violín, violoncelo, flauta, oboe o ukelele. Además, se invitará a los niños a participar en juegos y a resolver una gincana educativa.
Los beneficios de este tipo de metodología educativa alternativa son varios, ya que, "por un lado, el alumnado de bachillerato del CEEDCV adquiere competencias por el hecho de preparar la actividad y de participar con un rol protagonista".
ESPACIO MULTICULTURAL
"Y por otro --prosiguen-- también se beneficiará el sujeto colectivo destinatario en riesgo de exclusión social y al que va dirigido el producto cultural: menores en situación de acogida por circunstancias diversas, que pueden encontrar una buena oportunidad de disfrutar del patrimonio de la ciudad como punto de encuentro, socialización e inclusión, es decir, como espacio multicultural abierto y de acogida".
Las docentes recalcan que "el objetivo es vivir el espacio público y la calle misma como lugar acogedor, que haga sentirse como en casa y que actúe también como escenario de visibilización y reconocimiento identitario y personal de los menores acogidos".
Además, dicen, "en el contexto actual, es muy importante poner de relieve la importancia de la conservación del patrimonio cultural colectivo y denunciar su destrucción bélica, una vez más, como una forma premeditada de genocidio".