Un estudio de UJI, EVAP, Generalitat y sindicatos analizará sesgos de género en convenios colectivos:"Todos los tenemos"

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Europa Press C. Valenciana
Publicado: miércoles, 3 mayo 2023 14:56


VALNCIA, 3 May. (EUROPA PRESS) -

La Cátedra de Diálogo Social de la Universitat Jaume I (UJI), a propuesta de la Asociación de Empresarias y Profesionales de Valencia (EVAP) y junto a la Generalitat, CCOO PV, UGT PV, analizará los sesgos de género presentes en una treintena de convenios colectivos de más de una quincena de sectores económicos, para después ofrecer una guía de buenas prácticas en la negociación colectiva.

"Necesitamos datos para cambiar la realidad", porque "absolutamente todos tenemos sesgos", ha señalado la presidenta de EVAP, Eva Blasco, que ha presentado en rueda de prensa el proyecto junto a las catedráticas de Derecho del trabajo y de la seguridad social de la UJI Arántzazu Vicente e Inmaculada Ballester; la secretaria de Mujeres e Igualdad de CCOO PV, Cloti Iborra; la secretaria de Formación Empleo e Igualdad de Género de UGT PV, Pilar Mora; la directora general de Trabajo, Elvira Ródenas, y la directora general de Coordinación de Diálogo Social, Zulima Pérez.

Eva Blasco ha explicado que el proyecto de elaboración del 'Estudio de los sesgos de género existentes en la negociación colectiva', cuyos primeros resultados se conocerán en noviembre, nace de la necesidad de disponer de un diagnóstico sobre unos sesgos que tanto patronal como sindicatos "intuyen que existen" pero del que no disponen datos concretos.

La presidenta de EVAP ha indicado que el estudio se centra en el sector privado y que su intención no es "afear ningún convenio" sino realizar un "diagnóstico en positivo". La inquietud de analizar esta problemátca, ha destacado, nace de la "experiencia práctica" de existen estos sesgos, muchas veces inconscientes. "Ahora ya casi nadie niega que existe la desigualdad salarial y hay una brecha", ha comentado.

Arantzazu Vicente ha detallado que el desarrollo del informe consta de distintas fases. En una primera parte, de diagnóstico de sectores, se han seleccionado convenios, algunos de ámbito estatal, en actividades económicas "muy masculinizadas", "muy feminizadas" o por su relevancia en la economía de la Comunitat Valenciana para obtener una "imagen bastante amplia de la situación".

Así, el estudio está examinando las condiciones negociadas en sectores como la hostelería; la enseñanza privada concertada y no concertada; oficinas y despachos; industria química; metal; el agropecuario; el sector del azulejo, pavimentos y baldosas cerámicas; el comercio en sus distintas actividades; la seguridad y vigilancia; limpieza de edificios y locales; la construcción; residencias de tercera edad; el calzado; panaderías y pastelerías; estaciones de sevicio, industrias del plástico y transporte de mercancías por carretera.

En esa fase de análisis, la experta ha destacado que la principal dificultad que están encontrando las autoras del informe reside en la poca disponibilidad de datos para el diagnóstico a nivel sectorial, por lo que una de las recomendaciones que formularán será la de introducir cláusulas en la negociación colectiva que "permitan mayor transparencia", ha avanzado.

Después, en la actual fase en la que se encuentra el proyecto, se analizan las cláusulas convencionales para proponer otras cláusulas tipo, en ámbitos como los procesos de selección y contratación, la clasificación profesional, la formación, la promoción interna, las condiciones del trabajo, la conciliación familiar, el acoso sexual y la salud laboral.

En estos ámbitos, los sesgos de géneros pueden "parecer nimiedades hasta que te enfrentas a ellos", ha advertido Vicente. Como ejemplo, ha citado el empleo de equipos de protección individual en tallas grandes que no sirven para algunas empleadas. Otro ejemplo detectado es el de un convenio agrario en el que solo se habla de 'hombres' al describir los equipos a cargo de 'un jefe de cuadrilla', precisa Inmaculada Ballester.

"Aparte de esas cuestiones, nos interesa ver cómo van avanzando la normativa y los convenios colectivos" por ejemplo en materia de conciliación laboral, o en el caso de la lactancia, ya que en los últimos años se han publicado normas "muy importantes" y algunos cambios "no han empezado a trasponerse", ha explicado Ballester.

Por otro lado, en su análisis las expertas también están detectando prácticas "muy interesantes", por ejemplo en el fomento de la corresponsabilidad del hogar y cuidados entre los hombres, cuya implantación puede recomendarse a otros sectores.

De ese modo, se formularán cláusulas tipo "flexibles" y "abiertas" que se difundirán de forma abierta, en web y papel, con material complementario para formar con perspectiva de género a los agentes sociales y económicos que negociarán los convenios. A más largo plazo, se realizará un seguimiento de los resultados.

Zulima Pérez ha puesto el foco en que trabajar por la igualdad es un objetivo común para sindicatos, patronales, administraciones y universidad. Así, ha incidido en que, cuando se legisla, la administración acompaña sus normas de estudios de impacto de género dentro de su procedimiento normativo, pero que en cambio, en la negociación colectiva, que afecta directamente a las condiciones de las personas, no se han realizado.

Pilar Mora, de UGT PV, ha señalado que las mujeres sufren desigualdades en todos los ámbitos, que son "un reflejo de la sociedad patriarcal en la que nos encontramos". Ha destacado que desde el ámbito normativo se están intentado paliar con herramientas como los planes de igualdad, obligatorios en empresas a partir de los 50 trabajadores, pero que en un tejido productivo basado en pymes, "no podemos perder de vista una herramienta fundamental para el diálogo social como es la negociación colectiva".

En la misma línea, desde CCOO PV, Cloti Iborrra ha subrayado la importancia de contar con estudios en los que analizar "de forma rigurosa y objetiva" los convenios colectivos "desde una perspectiva de género", para conocer mejor la manera en la que nosotras mismas estamos negociando". Además, ha comentado que el estudio es una oportunidad para valorar el sistema de clasificación profesional, porque "lo de 'igual trabajo, igual salario' no es tan fácil'".

Por su parte, Elvira Ródenas ha apuntado que el tiempo medio de negociación de un convenio es de seis meses y que algunos se desarrollan "rápidamente" en un "corta y pega" que no da tiempo a la autoridad laboral a examinar en profundidad el texto.

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