Foto: FUNDACIÓ PEL LLIBRE I LA LECTURA
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VALENCIA, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Fundació pel Llibre i la Lectura, junto con el Gremi de Llibrers de València y la Associació d'Editors del País Valencià, ponen en marcha una campaña informativa alrededor del libro de educativo y su comercialización, que pretende impulsar este producto "sin intrusismo ni competencia desleal". En este punto, se oponen a la venta directa de este tipo de material por parte de las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPA).
"Entendemos que en estos momentos el ahorro económico es un elemento determinante en las decisiones de muchas familias, pero reivindicamos el legítimo derecho de los profesionales libreros para ejercer su oficio sin intrusismo comercial ni prácticas de competencia desleal", explican los impulsores de la iniciativa en un comunicado.
La campaña informativa sobre el libro de educativo tiene una triple finalidad, que pasa por "potenciar las ventas de libros educativos en las librerías; reivindicar el papel de las librerías en la venta del libro educativo y denunciar las prácticas de competencia desleal e intrusismo comercial; y establecer caminos de diálogo entre librerías, escuelas y padres, para reconducir la situación de la venta de libros para el curso escolar".
Al respecto, estos profesionales argumentan que en los últimos tiempos se ha generado un gran debate alrededor del libro de texto y se han ensayado varios métodos para su distribución, "sin haber hecho en muchos casos una reflexión previa sobre su idoneidad y sin tener en cuenta las consecuencias".
Los libreros y los editores valencianos apuestan por el acceso universal al libro educativo, para lo que proponen un modelo de ayudas a las familias que garantice el acceso universal y en igualdad de condiciones a la educación. Asimismo, defienden el gasto en libros como "una inversión en el futuro de las personas y del país" y se muestran de acuerdo con la creación de bancos de libros, "siempre que esta práctica esté regulada y programada teniendo en cuenta la viabilidad del sector del libro y no vaya en contra del que está establecido en la Ley del Libro".
También se refieren a las AMPA, sobre las que comentan que entienden su gestión en la compra de libros para facilitar unas mejores condiciones para las familias. No obstante, están "en contra de la venta directa sin cumplir las normas que regulan el comercio y con las consecuencias laborales, fiscales y tributarias que se derivan". "La venta directa sin cumplir con estos requisitos crea desigualdad y competencia desleal ante las librerías", sentencian.
"Los libreros --prosiguen-- han sido, y son, el canal natural de distribución de los libros, tanto de texto como de lectura. La adquisición de los libros de texto a través de vuestra librería de referencia, no sólo refuerza el tejido comercial local, con puestos de trabajo de calidad, sino que ofrece el servicio más profesional de gestión de reservas, devoluciones y posibilidades de financiación".
SUPERVIVENCIA "CONDICIONADA"
Añaden que la existencia de diversidad en la edición y de librerías en los barrios y pueblos es "fundamental para garantizar la diversidad cultural y el acceso a la cultura de todos los ciudadanos". "La supervivencia de este sector comercial está condicionada, en gran medida, por la venta del libro de texto y los materiales didácticos para la enseñanza y es fundamental el cumplimiento, por parte de todos, de las condiciones legales y comerciales que regulan el sector", advierten.
Por todo ello, invitan a hacer una reflexión sobre las prácticas de distribución de libros en las escuelas y el papel de las AMPA y añaden que están "abiertos a buscar propuestas que sean positivas para todos, desde el diálogo y el cumplimiento de la ley".