Una titulada del Campus de Gandia de UPV gana el I premio nacional de acústica para jóvenes investigadores Andrés Lara

Silvia Adrián
UPV
Actualizado: miércoles, 1 diciembre 2010 14:52

VALENCIA, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -

Una titulada del Campus de Gandia (Valencia) de la UPV ha ganado el I Premio Nacional de Acústica para Jóvenes Investigadores Andrés Lara 2010. Los resultados de su trabajo permitieron constatar fenómenos que habían sido predichos pero nunca habían sido observados experimentalmente en transductores con este grado de focalización. Las fuentes focalizadas objeto del estudio tienen gran relevancia en aplicaciones médicas e industriales.

Silvia Adrián Martínez, titulada en Ingeniería Técnica de Telecomunicación en el Campus de Gandia de la UPV y Máster en Ingeniería Acústica por la UPV, ha obtenido el I Premio Nacional de Acústica para Jóvenes Investigadores Andrés Lara 2010 que otorga la Sociedad Española de Acústica, SEA, por su trabajo 'Caracterización del campo acústico generado por transductores focalizados', dirigido por el profesor Francisco Camarena.

Este tipo de transductores ultrasónicos es muy utilizado en tratamientos médicos de precisión, cuando se requieren grandes concentraciones de energía en zonas pequeñas y muy localizadas, de ahí la importancia de la caracterización del campo acústico que generan.

En concreto se estudió el cambio de posición que sufre el foco real (lugar dónde se deposita la energía) respecto al foco geométrico del sistema al aumentar la potencia aplicada al transductor. Para ello se desarrolló el dispositivo experimental y los algoritmos de procesado de la señal requeridos para obtener resultados con la resolución necesaria para observar el fenómeno.

Los resultados de este trabajo permitieron constatar fenómenos que habían sido predichos pero nunca habían sido observados experimentalmente en transductores con este grado de focalización.

Según Silvia Adrián, "es muy importante conocer con precisión la posición del máximo de presión real, ya que es allí donde se va a depositar toda la energía. La absorción en los tejidos aumenta con la frecuencia, por ello, con la formación de ondas de choque puede incrementar de forma significativa la cantidad de energía convertida en calor. También es importante conocer la zona en que se localizan los mínimos de presión, puesto que influyen en la aparición del fenómeno de cavitación".