Valencia.- Religiosas crean una ONG para construir en Perúcentros para ancianos y niños abandonados

Actualizado: jueves, 26 julio 2007 13:54

VALENCIA, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -

Religiosas de la congregación Hermanas de la Doctrina Cristiana de Valencia han impulsado la construcción en Perú de dos centros para la atención de ancianos abandonados y jóvenes y niños, hijos de familias desestructuradas. Los proyectos, que beneficiarán a más de un centenar de personas, son promovidos y cofinanciados a través de la ONG 'Effetá Madre Micaela', recientemente creada en Valencia por la congregación para desarrollar programas de desarrollo y canalizar ayudas, según informó el Arzobispado en un comunicado.

El centro para ancianos se está construyendo en la ciudad de Nasca, donde vive la religiosa valenciana María Isabel Herbás, quien trabajará en su puesta en marcha. Según la congregación, que agradeció la colaboración "extraordinaria y muy generosa" en este proyecto de una familia valenciana, la iniciativa "pretende acoger y ofrecer atenciones a aquellas personas mayores de Perú que no tienen sus necesidades básicas cubiertas"

Entre otras actividades, las religiosas tienen previsto realizar talleres de lectura y de salud, así como reuniones, "además de darles comida y acogida". Por su parte, la ciudad peruana de El Callao, cercana a Lima, albergará próximamente otro centro para jóvenes y niños "que viven marginados en barrios muy pobres", según las mismas fuentes.

Asimismo, las Hermanas de la Doctrina Cristiana han enviado desde Valencia ayudas económicas para mantener otro albergue para niños de "alto riesgo" de familias desestructuradas en la ciudad colombiana de Ibagué. El centro les ofrece comida, refuerzo escolar y ayuda psicológica, entre otras atenciones, con el fin de que "encaminen bien sus vidas y no se conviertan en 'niños de la calle'", explicaron.

La ONG fue creada por religiosas Hermanas de la Doctrina Cristiana en Valencia con el nombre de 'Effetá Madre Micaela', expresión que une el término arameo que significa "ábrete" con el que hace referencia al nombre de la fundadora de la congregación".

Las Hermanas de la Doctrina Cristiana fueron fundadas por la religiosa Micaela Grau en 1880 con el carisma de "difundir la doctrina de Cristo por medio de la enseñanza, sobre todo entre las personas necesitadas", según las mismas fuentes.