MADRID, 28 Nov. (EDIZIONES) -
Coincidiendo con el vigésimo aniversario del estreno de Titanic, James Cameron, que se encuentra inmerso en la producción de las secuelas de Avatar, ha concedido una entrevista a Variety en la que recuerda los mejores momentos del rodaje de la segunda película más taquillera de la historia. El cineasta no ha dejado a nadie indiferente al confesar que estuvo a punto de pelearse con Harvey Weinstein y golpearle con un premio Oscar.
La discusión entre Cameron y el conocido productor tuvo lugar durante un espacio publicitario de la ceremonia de los Oscars de 1998, en la que Titanic se alzó con 8 estatuillas, entre las que destacan Mejor Película y Mejor Director. "La música había empezado a sonar para que volviéramos a nuestros asientos. La gente a nuestro alrededor decía '¡Aquí no! ¡Aquí no!'", narra Cameron.
El motivo de la discusión entre Cameron y Weinstein no fueron los abusos sexuales del productor, sino el comportamiento del productor con Guillermo del Toro, uno de los mejores amigos del director de Titanic. El director y guionista mexicano no tuvo una buena experiencia cuando trabajó con Miramax en la producción de Mimic debido al poco poder de decisión que del Toro tuvo en la cinta.
"Harvey apareció y empezó a hacerme la pelota y a hablarme de los buenos que eran ellos con los artistas, y tuve que leerle la cartilla y darle mi opinión sobre cómo se comportaban con los artistas dada la experiencia de mi amigo Guillermo. Y eso llevó al altercado", explica Cameron.
Desde el pasado mes de octubre decenas de mujeres, entre las que se encuentran Gwyneth Paltrow y Angelina Jolie, han denunciado haber sido víctimas de acoso sexual de Harvey Weinstein. El ejecutivo de Hollywood se encuentra actualmente ingresado en un centro de rehabilitación.
