MADRID, 3 Nov. (EDIZIONES) -
"Nunca volverás a trabajar en esta ciudad", le dijeron a Mila Kunis por negarse a posar semidesnuda para una revista masculina para promocionar una de sus películas. Así lo relata la actriz, que arremete contra el sexismo que ha sufrido en Hollywood por el simple hecho de ser mujer.
En una carta abierta publicada en A plus, una página web que cofundó junto con su marido, Ashton Kutcher, Kunis relata su experiencia. La actriz denuncia en su post que un productor de una película, de la que no menciona el título, la amenazó con arruinar su carrera por negarse a posar semidesnuda para promocionar el filme.
"A lo largo de mi carrera ha habido momentos en los que he sido insultada, marginada, pagada de menos, creativamente ignorada y menospreciada de otras formas en función de mi género", asegura Kunis. "Me enseñé a mí misma que para tener éxito como mujer en esta industria tenía que jugar con las reglas del 'club de los chicos'. Pero con el paso del tiempo y con lo que llevo trabajando en esta industria, me doy más cuenta de que eso es mentira. Y lo que es peor, fui cómplice permitiendo que esto pasara", añade la actriz.
HARÁ FRENTE A LOS COMENTARIOS SEXISTAS
Kunis creó su propia productora con otras tres mujeres, y relata una reciente experiencia sobre un proyecto que iba a salir a la luz. En los emails que envió un productor a los directivos del proyecto incluyó un comentario en particular que reducía el nombre de Mila Kunis a esposa y madre. "Y Mila es una superestrella. ¡Una de las grandes actrices de Hollywood y pronto será la esposa de Ashton y la madre de su bebé!", decía el correo.
"Este es el email completo. Dejando de lado los hechos imprecisos, redujo mi valor a nada más que a mi relación con un hombre de éxito y a mi habilidad para tener hijos. Ignoró mis contribuciones creativas y logísticas y las de mi equipo", escribe Kunis. La actriz reconoce que es un "pequeño comentario", pero que "las mujeres tienen que lidiar con ellos todos los días en las oficinas, en llamadas y en emails. Son pequeñas agresiones que devalúan las contribuciones y el valor de las mujeres trabajadoras", apunta la intérprete.
"A partir de ahora, cuando me enfrente a ese tipo de comentarios, sutiles o abiertos, los abordaré de frente, los pararé en el momento y haré todo lo posible para educar", afirma la actriz. "No puedo garantizar que mis objeciones sean tomadas en serio, pero por lo menos ahora soy parte de la creación de un entorno donde existe la oportunidad de crecer. Y si mis comentarios caen en oídos sordos, elegiré marcharme", sentencia.
