Magdalena Lasala rescata en su última novela la figura de la mora Zaída, amante de Alfonso VI y madre de su hijo Sancho

Actualizado: martes, 29 mayo 2007 11:36


MADRID, 29 May. (EUROPA PRESS) -

Magdalena Lasala (Zaragoza, 1958) rescata en su último libro la figura de la mora Zaída, concubina musulmana de Alfonso VI y madre de su hijo Sancho, en una novela que da voz a este personaje silenciado por la Historia.

'Zaída, la pasión del rey' es el título de esta obra, editada por Fundación José Manuel Lara, que trascurre en la época dorada de Al-Andalus, un periodo anteriormente abordada por esta escritora en otros de sus libros.

Ahora, Lasala instala a sus personajes en el año 1085, cuando Alfonso VI conquista toledo y establece allí su corte. Los reinos de Al-Andalus, temerosos por este avance cristiano, reclaman la ayuda de los almorávides del norte de África, guerreros feroces capitaneados por Yusuf. Sin embargo, lo que al principio parece una buena estrategia pronto se vuelve en contra de esos reinos aliados de Yusuf. Al-Mutamid, rey de Sevilla, ante la perspectiva de tener que soportar la tiranía almorávide solicita ayuda a Alfonso VI utilizando como embajadora a la bella Zaída.

La pasión nace entre el rey y la cortesana, pero la corte no está dispuesta a aceptar ese amor ni las consecuencias que traerían para el reino cristiano un descendiente con sangre musulmana.

En torno a estos hechos, Magdalena Lasala ha novelado la historia de esta pasión que, en opinión de la autora, "se ha querido ocultar por la historiografía pero no se ha silenciado en el sentimiento popular". "El pueblo siempre quiso a Zaída porque supuso la transgresión a las imposiciones que recaían sobre el pueblo llano", apostilló.

FECHAS POCO CLARAS

Lasala explicó la dificultad con la que ha topado para centrarse en unas fechas concretas a la hora de enmarcar diversos aspectos de la vida de la mora Zaída. "Incluso los grandes historiadores no se ponen de acuerdo", apuntó. En su opinión, las más creíbles son las que cita el profesor Gonzalo Martínez Díez, gran estudioso del Cid y de Alfonso VI. "La época concreta es la que marca el final de un momento histórico y el advenimiento de otro", dijo.

"Zaída tuvo origen real y yo la sitúo concretamente en la herencia omeya, una de las más sobresalientes", señaló la autora. "Zaída viajó a Toledo como embajadora de Al-Mutamid y queda demostrado que era su nuera y también biznieta de Almamud de Toledo", agregó.

Lasala ha contado esta historia a dos voces, las de Zaída y su criada. A través de ellas da a entender el "tormento interior" de esta mujer que se cristianizó, "aún con peligro de su vida", para luchar por los derechos a la sucesión de su hijo Sancho. "La veo como una mujer muy moderna que luchó por sus propias convicciones", añadió.

REINTERPRETAR LA HISTORIA

La escritora destacó el hecho de que en su proyecto de escribir novelas históricas está la necesidad de "reinterpretación de la Historia para construir un futuro más a nuestro gusto".

"Aunque en esta época los protagonistas de la historia fueran ellos, estaban rodeados de mujeres de importancia trascendental, como es el caso de Zaída. Por eso existe una enorme historia anónima de mujeres", explicó la autora.

Zaída es el "símbolo" de lo que deberíamos prepararnos a entender. "Aún seguimos sin comprender la aportación de Al-Andalus a nuestra cultura. Ese sincretismo no ocurrió en ninguna otra parte", dijo.

Según Lasala, el islamismo integrista nunca reivindicó Al-Andalus ya que, de hecho, lo consideraba como Sodoma y Gomorra. "Por eso, que Al-Qaeda reivindique hoy Al-Andalus indica una gran incultura y desinformación. Los integristas pretenden hurtarnos la historia", aseveró añadiendo que es preciso "recuperar esa herencia y no falsear la Historia".

"Aquel fue un periodo muy largo y muy manipulado. Me emociona que Alfonso VI se llamara rey de las tres Españas y de Toledo, que tuvo una simbología en una y otra cultura muy importante", concluyó Lasala.