MADRID 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
El pívot español Felipe Reyes se mostró hoy convencido de que la última jugada del partido que anoche enfrentó a los de Pepu Hernández contra Croacia, y que supuso el fin a una racha de 28 partidos invicta, fue falta.
"No sólo nosotros, sino todo el pabellón ha visto que era falta", aseguró.
Reyes, que al igual que sus compañeros se encontraba apenado tras la primera derrota del combinado español en 710 días, indicó que era difícil sacar algo "positivo" del resultado del partido, aunque reconoció que es "mejor perder ahora que no hacerlo más adelante" en las siguientes fases del Eurobasket.
Sobre el papel de la selección española en el nuevo grupo en el que ha quedado emparejada, el pívot cordobés consideró que les había tocado "un grupo muy díficil", ya que tendrá enfrente a "tres grandes selecciones".
Así, explicó que además de jugar contra "la actual campeona de Europa", en alusión a Grecia, no hay que olvidar que el equipo ruso "está haciendo un grandísimo europeo" y concluyó advirtiendo que tienen "mucho respeto" hacia Israel, a pesar de que, a priori, "a lo mejor ha entrado como el equipo más débil".