Baloncesto/NBA.- Los aficionados de los Spurs de San Antonio celebran su cuarto anillo de campeones con el equipo

Actualizado: sábado, 16 junio 2007 13:37

SAN ANTONIO (ESTADOS UNIDOS), 16 Jun. (EP/AP) -

Cientos de aficionados de los Spurs acudieron con banderas y teñidos de negro y plata al aeropuerto de San Antonio para ofrecer una cálida bienvenida a los flamantes ganadores del anillo 2007 y celebrar el cuarto campeonato para los tejanos.

Entre gritos de "Go, Spurs, Go" durante la llegada del equipo, los aficionados estuvieron dirigidos por la mascota del conjunto tejano, Coyote, y el grupo de 'cheerleaders' del equipo. Así, durante el acto los tres trofeos anteriores se unieron al recién conquistado, portado por Tim Duncan, único jugador de los Spurs presente en los cuatro títulos.

Después del aterrizaje del vuelo procedente de Cleveland, donde los Spurs barrieron 4-0 a los Cavaliers, Bruce Bowen encabezó a la delegación aclamando a la afición: "Este os lo debemos por completo a vosotros. Muchas gracias por todo el apoyo que nos habéis prestado durante la temporada", exclamó.

Por su parte, el 'MVP' de la final, el francés Tony Parker también encajaba a la perfección entre la feliz multitud: "Siempre digo que sóis la mejor afición de toda la NBA. Este ha sido un gran viaje", animó emocionado.

Apostados cerca de la sala de pasaportes, a la espalda de un camión, algunos aficionados padecieron temperaturas de más de 32 grados durante cerca de tres horas hasta la llegada del avión del equipo.

Y es que en una ciudad donde no hay ningún otro equipo en las Ligas Profesionales, los Spurs son el foco de atención. Por ello, ayer, los coches de la ciudad recorrieron las calles pendiendo banderas de sus ventanas. Además, los marcos de todas las puertas fueron adornados con motivos en negro y plata en honor de los Spurs. Los otros tres campeonatos de San Antonio llegaron en 1999, 2003 y 2005, una proximidad temporal que no impidió a los aficionados aguantar y sudar a pleno sol durante horas con tal de poder vislumbrar a un equipo que reconoció nada más aterrizar, que la victoria de este año supone una emoción todavía mayor.