Los blancos estuvieron letales desde la línea de tres
SALONICA (GRECIA), 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Real Madrid allanó su camino de clasificación para los octavos de final de la Copa ULEB después de demostrar en Grecia ante el Paok (53-76) su excelente momento de forma, y sumar su tercer triunfo consecutivo en Europa con una exhibición desde el perímetro y Smith, con 17 puntos en su casillero, recogiendo el testigo anotador de Bullock.
Los de Joan Plaza, líderes indiscutibles de la ACB, con doce de doce, se vieron además beneficiados de la victoria del Unics Kazan ruso sobre el Estrella Roja (94-72) y sigue con opciones de alcanzar la primera plaza del grupo D, lo que le supondría un cruce teóricamente más asequible y la ventaja de jugar el encuentro de vuelta en Vistalegre.
Los blancos tienen una victoria menos que el Unics y el Estrella Roja, pero ambos deben pasar todavía por el recinto madridista en las tres jornadas de la primera fase que restan todavía por disputarse en esta competición.
El Real Madrid rompió además la racha europea a domicilio y lo hizo de manera incontestable, desde el principio y con ventajas considerables de hasta 20 puntos en el tercer cuarto. Su acierto desde la línea de 6,25 metros se inició en el primer periodo, lo que le sirvió ya para marcar distancias (9-16).
En el segundo, la dinámica madridista incrementó aún más la renta. Dos triples consecutivos de Louis Bullock la situaron en 19 puntos (20-39), y trece de ellos le alcanzaron para llegar al descanso con la tranquilidad del trabajo bien hecho (26-39).
En el segundo acto, el Real Madrid rompió aún más el encuentro alcanzando la veintena de puntos de renta, que al final fueron 23, dejando en sólo 53 puntos a los griegos, y protagonizando un auténtico festival de triples con 13 de 29 intentos, y es que hasta siete jugadores lograron convertir desde la línea de 6,25 metros, con un Smith sensiblemente inspirado, con un cincuenta por ciento de acierto y cuatro triples en su haber.
VICTORIA CRUCIAL DEL GRAN CANARIA
Por su parte, el Gran Canaria derrotó en su pabellón al Hemofarm serbio (82-73) y encarrila su clasificación para los octavos aunque deberá mejorar su cuarta plaza actual para disfrutar de un cruce más asequible.
Los canarios, aún con sufrimiento, exhibieron la versión sólida que vienen demostrando en casa y repitieron victoria sobre un equipo al que ya ganaron en la primera vuelta, rompiendo así la mala racha en la ACB que les había llevado a encajar tres derrotas consecutivas ante Caja San Fernando, Real Madrid y Akasvayu.
El equipo de Salva Maldonado encontró en Vroman a su ejecutor. El pívot americano firmó un auténtico partidazo con un total de 29 puntos, bien secundado por Hunter, con 16, y Kornel David, con 11. Los locales dominaron el marcador y en el tercer cuarto lograron abrir la brecha que parecía ya definitiva, pero el Hemofarm, guiado por Rakic, firmó un parcial de 2-14 que estrechó las diferencias, aunque los canarios terminaron sellando el triunfo con Hunter y David acudiendo al rescate.
