MADRID, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Eurobasket 2022 cuenta con una curiosa circunstancia, pues tres de los cuatro equipos que la FIBA sitúa como máximos favoritos a ganar la competición, se verán las caras en el Grupo B, en el que la vigente campeona, Eslovenia, se tendrá que ver las caras con Francia y Lituania, además de la anfitriona Alemania.
A pesar de que no se espera que tengan problemas para clasificarse (acceden a octavos de final cuatro de los seis equipos), el devenir de este grupo sí que puede definir la competición al establecer cuáles serán los futuros cruces. Si se cumplen los pronósticos, el que quede tercero de esta terna tendrá un complicado enfrentamiento en la siguiente ronda contra Turquía o España. Además de las tres potencias, se encuentran la siempre peligrosa Alemania, Bosnia y Hungría.
Quien defiende su corona es Eslovenia, que pasó de ganar siendo la sorpresa en 2017 a ser el equipo a batir en 2022. El motivo es el mismo que le llevó a ser campeón: Luka Doncic. Tras colgarse su primer oro con solo 18 años, afronta su segundo Eurobasket con 23 y convertido en uno de los mejores jugadores del mundo, capaz de anotar, asistir, rebotear y defender.
El jugador de los Dallas Mavericks será una de las grandes estrellas y aspirantes al 'MVP' del torneo, y junto a él seguirá la otra gran referencia del equipo, Goran Dragic, cuyo talento está fuera de toda duda a pesar de su edad y que juega en la NBA (Chicago Bulls) como también Vlatko Cancar (Denver Nuggets).
La muñeca de Klemen Prepelic (Valencia Basket), que ya fue clave hace cinco años, el otro Dragic, Zoran, y el nacionalizado Mike Tobey, nuevo fichaje del Barça, completan un equipo de nivel que el pasado verano se quedó sin medalla en los Juegos Olímpicos al ser cuarta cuando quizá aspiraba a más. Llega a la cita tras caer claramente con Alemania (90-71) en la 'ventana FIBA'.
FRANCIA Y LITUANIA LLEGAN CON GANAS
Su gran rival, tanto en el grupo como en el Eurobasket en general, será la selección francesa, que sigue bajo la batuta de un clásico como Vincent Collet y que aspira a pelear por su segundo oro continental tras el de 2013.
Francia, actual subcampeona olímpica y bronce mundial, es el equipo con más NBA en su plantilla, cuatro, que hubiesen sido cinco en el caso de no haberse lesionado Frank Ntilikina durante la preparación. Así, cuenta con jugadores de élite en todas las líneas, con Rudy Gobert (Utah Jazz) como gran referente interior y Evan Fournier (New York Knicks) por fuera.
En la lista están también los madridistas Guershon Yabusele, que ha firmado una gran temporada, y Vincent Porier, que aportará mucha fuerza por dentro, aunque no podrán contar con 'clásicos' como Nando de Colo y Nicolas Batum, pero sí con Thomas Heurtel.
La tercera en discordia es Lituania, que va a estar liderada por una de las mejores parejas interiores del campeonato como es la que forman Domantas Sabonis (Sacramento Kings), hijo del mítico Arydas, y Jonas Valanciunas (New Orleans Pelicans). Dos jugadores que se encuentran en su madurez y que quieren devolver a su país a las medallas, algo que no consiguen desde 2015.
Los bálticos han ganado todos sus partidos de preparación y cuentan con un Ignas Brazdeikis (Zalgiris) que, tras abandonar la NBA, se ha desquitado como un anotador del máximo nivel. Tienen también grandes jugadores por fuera como el culé Rokas Jokubaitis, el baskonista Rokas Giedraitis o Marius Grigonis (Panathinaikos), pero que parecen depender en exceso de sus dos estrellas.
De todos modos, Lituania llega en muy buena forma a este campeonato apoyado en una racha de nueve victorias consecutivas, que deben elevar la moral de un equipo que desea enmendar su ausencia en Tokyo 2020 y unos últimos torneos lejos de los mejores.
Un escalón por debajo pero sin renunciar a nada se encuentra Alemania, ya asentada en su renovación tras el adiós de Dirk Nowitzki. Los germanos tienen en sus filas a tres jugadores NBA, que serán los encargados de tratar de dar la sorpresa en un grupo muy difícil, aunque sabiendo que la segunda fase podría ser mejor para el equipo que entrena el canadiense Gordon Herbert. Incluso, han sido capaces de ganar a Eslovenia en las ventanas previas a la competición.
Denis Schroeder (Houston Rockets), Franz Wagner (Orlando Magic) y Daniel Theis (Boston Celtics) estarán acompañados de gente con experiencia en Europa como Johannes Voigtmann y cuentan con el aliciente de ser los anfitriones, tanto en la fase de grupos, en el Lanxess Arena de Colonia, como en la fase final que se disputará en Berlín. Ya en 1993, con el calor del público, dieron la campanada con el oro ante Rusia.
Por su parte, Bosnia es el equipo que sueña con dar la sorpresa en caso de que alguno de los favoritos falle. El equipo balcánico, que tuvo muchos problemas para jugar la competición, ha demostrado ganando a Francia en la previa al Eurobasket que llegan a Alemania sin miedo a nada.
El principal estandarte bosnio será Jusuf Nurkic (Portland Trail Blazers), que tendrá que echarse el equipo a la espalda acompañado del flamante fichaje del Real Madrid Dzanan Musa y del base nacionalizado John Roberson, ex del Estudiantes.
El último integrante del grupo es Hungría, cuyas aspiraciones parecen incluso lejanas de las de Bosnia. Los magiares cuentan con jugadores interesantes como Adam Hanga (Real Madrid) o los ex de Obradoiro Rosco Allen y Marco Filipovity, pero cualquier victoria que rascasen en la fase de grupos sería una gran sorpresa.
