SALT LAKE CITY (ESTADOS UNIDOS), 27 May. (EUROPA PRESS) -
Los Jazz de Utah recortaron diferencias (2-1) en la final de la Conferencia Oeste después de imponerse (109-83) a los Spurs de San Antonio tras firmar una segunda mitad impecable en el Energy Solutions Arena, donde no conocen la derrota.
Y es que los jugadores de Jerry Sloan ofrecen un balance de 9-0 en los partidos que han disputado esta postemporada en su propia pista. En este sentido, su público, uno de los más calientes de toda la Liga, llevó ayer en volandas a los suyos para remontar la desventaja de ocho puntos con que finalizaron el primer parcial (15-23).
La reacción se produjo a la vuelta de vestuarios, pues comandados por el base de segundo año Deron Williams, autor de 31 puntos y 8 asistencias, los Jazz firmaron un tercer parcial de 32-20 a su favor. Este balance fue refrendado en el último cuarto, donde Utah pasó por encima de su rival para infringirle una derrota sangrante por veintiseis puntos de diferencia.
Junto al 'sophomore' Williams, en los Jazz volvió a brillar con luz propia Carlos Boozer. El ex ala pivot de la universidad de Duke fue amo y señor de la zona con 27 puntos y 12 rebotes. Además, la buena noticia para los Jazz es que no acusaron los problemas de faltas del turco Mehmet Okur (0 puntos) para imponerse con solvencia a los Spurs.
Los de San Antonio sí pagaron el discreto partido de su líder, Tim Duncan, que 'sólo' fue capaz de firmar 16 puntos y 8 rebotes. Sin embargo, su gran borrón en la estadística fueron sus ocho pérdidas de balón. Mientras, el base galo Tony Parker demostró la madurez que está evidenciando esta temporada con 25 puntos y 7 asistencias.
