Baloncesto/Mundial.- (Previa) España defiende en Alemania una corona muy deseada

Actualizado: jueves, 18 enero 2007 13:13

La selección, con un bloque consolidado, debuta el sábado ante Egipto e intentará ser la primera en repetir título desde 1974

MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

La selección española de balonmano defenderá a partir del sábado la corona mundialista conquistada hace dos años en Túnez y lo hará con un bloque consolidado tanto en la dirección técnica como en la pista, pero sabedor de la dificultad histórica de repetir éxito.

El Mundial de Alemania dará comienzo mañana con el partido inaugural entre los anfitriones y Brasil, pero la aventura de los hombres de Juan Carlos Pastor se iniciará al día siguiente ante la peligrosa Egipto.

No han cambiado demasiadas cosas en el combinado nacional desde hace dos años. En tierras tunecinas, un seleccionador provisional y una nueva generación de jugadores provocó uno de los mayores éxitos a nivel de equipo, y ahora, España, con Pastor renovado y seguro en el cargo y con el mismo grupo de jugadores salvo contadas excepciones (Tomás, Belaustegui y Roberto García), afronta el intento de ser la primera en repetir título mundial desde 1974 cuando Rumanía reeditó el logrado cuatro años antes.

La selección ya ha demostrado que lo sucedido en Túnez no fue fruto de la casualidad. El oro en los Juegos del Mediterráneo de Almería meses después y la plata en el Europeo de Suiza de 2006 dejan claro que hay un grupo para aspirar a estar entre los mejores.

Sin embargo, ese grupo de aspirantes es muy grande y todos tienen las mismas opciones. Además, este año hay fase de cuartos de final y un mal día te puede dejar fuera. El técnico del BM Valladolid ya ha avisado de que "ese día sólo vale ganar" y David Barrufet apuntó que "un gol" en esa ronda puede provocar que de luchar por las medallas se pase a la lucha del quinto al octavo.

Tampoco hay que olvidar que el título mundialista concede el doble premio de conseguir el billete directo para los Juegos de Pekín de 2008, con el consiguiente ahorro de energías y una 'menor' presión en el siguiente Campeonato de Europa.

Para lograr este objetivo, Juan Carlos Pastor no ha cambiado demasiado. Ha vuelto a conjugar a veteranos (Barrufet, Garralda, Hombrados, Lozano o Alberto Entrerríos), con ya consagrados (Iker Romero, 'Juanín' García o Rolando Uríos), nuevos que introdujo (Chema Rodríguez, Garabaya o Raúl Entrerríos), más un debutante (Víctor Tomás), que tendrá la responsabilidad de sustituir al lesionado Albert Rocas.

La concentración del combinado nacional ha sido fructífera en cuanto a resultados (victorias ante Noruega, Polonia, Brasil y Rusia), pero no ha estado exenta de problemas. Primero, con la rotura de los huesos propios de la nariz de Garabaya, que ha logrado llegar a tiempo, y luego con la lesión de otro de los nuevos, el lateral azulgrana Salva Puig, reemplazado por Ion Belaustegui (Ciudad Real), que ya estuvo en el Europeo de Suiza.

PELIGROSO COMIENZO ANTE EGIPTO.

El sábado comenzará la competición de verdad. España jugará en Bremen en un teórico sencillo grupo D junto a Egipto, la República Checa y Qatar, por lo que debería pasar invicta a una segunda fase donde se cruzaría en otra liguilla con los primeros y segundos de los grupos E y F, entre ellos selecciones de más nombre, salvo sorpresas, como Dinamarca, Croacia o Rusia, y con el objetivo de quedar bien situado para los decisivos cuartos de final.

De todos modos, Juan Carlos Pastor insiste en que hay que ir día a día y lo primero (18:00 horas) que llega es el equipo norteafricano, el segundo más importante de África tras Túnez y contra el que nunca se ha perdido.

El partido es engañoso, no sólo por ser el siempre complicado debut sino porque Egipto ha arrancado en su historia dos empates ante España, uno de ellos (19-19) en el Mundial de Japón de 1997. Además, los egipcios vienen de ganar a Alemania en un amistoso (29-30), buena muestra de que no debe haber confianzas. Luego, checos y qataríes no tendrían que crear demasiadas complicaciones.

La selección española asegura que no llega al torneo con presión, pero se sabe dentro del grupo de favoritas que encabezan Francia, verdugo en la final de Suiza, la talentosa Croacia, campeona mundial hace cuatro años, las emergentes Dinamarca y Túnez o Alemania, impulsada por su condición de anfitriona. El reto empieza el sábado y las posibilidades pasarán por mostrar una agresiva defensa, controlar las pérdidas de balón y poder correr.