BARCELONA, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
El seleccionador español de balonmano, Valero Rivera, aseguró que la selección afronta el Europeo de Austria, que se celebrará del 19 al 31 de enero, con "ilusión" y "motivados" para mostrar de lo que son capaces y se marcó como objetivo estar entre los cuatro finalistas.
"La ilusión y el objetivo es estar en las semifinales. Vamos a demostrar lo que somos capaces de hacer en este Europeo. El equipo después del Mundial ha ido de menos a más, se ha ido consolidando, hemos mejorado en ataque pero tenemos que mejorar el repliegue defensivo", señaló Rivera en rueda de prensa.
El técnico valoró muy positivamente las dos fases de preparación --con la disputa del Campeonato de España incluido-- que la selección está realizando en Barcelona. "Estamos muy satisfechos del trabajo dentro y fuera de la pista. No hemos jugado aún con equipos del nivel que nos vamos a encontrar pero en los próximos días lo haremos. Estoy muy satisfecho de las estancias en Barcelona, aunque hay que mejorar de cara a lo que nos viene", advirtió.
Respecto al grupo en el que España está emparejada --con República Checa, Hungría y Francia--, afirmó que es un grupo "difícil como lo es el Europeo" y alertó de que la actual campeona del mundo y olímpica está "por encima de todos", mientras que el resto de selecciones, incluida el bronce en Pekín 2008, son "más parejas".
"Menos Francia, los demás estamos muy igualados. El Europeo es más duro que el Mundial porque en el Mundial siempre sabes que hay algunos partidos que vas a ganar y no te desgastarás. Creo que todos los marcadores serán muy ajustados en cualquier grupo. Aún así, por supuesto que España tiene que salir a ganar", vaticinó.
El seleccionador español hizo mención a lo ocurrido en el pasado Mundial 2009, en el que España quedó en el decimotercer puesto, e insistió en pasar página. "Cuanto menos se hable de ello, mejor. Hay que seguir en el camino que estamos, hemos hecho una fase de clasificación muy buena y llevamos un año de mejora en el equipo", aseguró Rivera.
Del mismo parecer fueron los capitanes de la selección, José Javier Hombrados y Alberto Entrerríos, quienes reconocieron que aquella cita fue un "golpe duro", pero que en el Europeo empiezan "de cero" y que parten hacia Austria con la voluntad de presentar sus "credenciales" para llegar a "lo más lejos".
"Somos realistas, el nivel de otros equipos ha subido, la igualdad es máxima y sabemos de esa dureza y rivalidad, pero este grupo va con toda la fuerza e ilusión del mundo", aseveró al respecto Entrerríos.
