Nuevo susto con la caída de Slanger (Rabobank) en una dura jornada donde de los favoritos sólo Scarponi (Lampre) probó suerte al final
ORVIETO (ITALIA), 11 (EUROPA PRESS)
El ciclista holandés Pieter Weening, del Rabobank, se convirtió en el nuevo líder de la edición 2011 del Giro de Italia tras adjudicarse este miércoles la dura quinta etapa, disputada entre las localidades de Piombino y Orvieto sobre 191 kilómetros.
Fue una jornada complicada, donde la innovación de los organizadores consistía en los tramos de tierra prensada situados en el tramo final del día, marcado por el sol, lo que, al menos, no dejó en mal estado la carretera ni convirtió en un 'infierno' esta etapa.
De todos modos, estos kilómetros tampoco resultaron finalmente definitivos, ya que los aspirantes a la victoria final no se movieron cuando la tierra apareció, a partir de los últimos tres kilómetros de ascensión a la Croce de Fighine, y tampoco en el empinado final, salvo el italiano Michele Scarponi (Lampre-ISD), que lo intentó sin éxito.
Así, tras la jornada neutralizada en señal de duelo por el fallecimiento el lunes del belga Wouter Weylandt, los ciclistas se prestaron a recuperar la actividad competitiva, aunque la etapa volvió a tener caídas, una de ellas con cierto susto cuando el holandés Tom Slanger (Rabobank) se fue al suelo en uno de los tramos de tierra y en una zona estrecha, y por momentos cundió cierto pánico al ver que el ciclista no se movía, aunque finalmente quedó en un susto, pese a que tuvo que ser trasladado al hospital.
En ese momento, el suizo Martin Kohler, del BMC Racing, marchaba escapado en solitario desde el kilómetro 12, y había llegado a tener casi 13 minutos de renta, pero fue capturado por Pieter Weening y el francés John Gadret (AG2R) a falta diez kilómetros.
WEENING SE MARCHA, SCARPONI PRUEBA FORTUNA.
El trío colaboró para aguantar la embestida final del grupo de favoritos, donde aún se mantenía la 'maglia rosa' David Millar (Garmin-Cervélo), pese a sus problemas en la última cota puntuable del día, pero el holandés decidió probar en solitario de cara al duro final dejando fácilmente a sus dos compañeros.
Weening supo aguantar la empinada carretera con destino a Orvieto, con tramos de hasta el 15 por ciento, y se vio favorecido por la ausencia de 'batalla' por detrás entre los grandes aspirantes a la victoria final.
Y es que sólo Michele Scarponi lo intentó con fuerza, pero no tuvo éxito y fue reintegrado rápidamente a la disciplina de un grupo donde marchaban igualmente los españoles Alberto Contador (Saxo Bank), Joaquím Rodríguez (Katusha) e Igor Antón (Euskaltel-Euskadi), y otros favoritos como el italiano Vicenzo Nibali (Liquigas), el ruso Denis Menchov (Geox) o el checo Roman Kreuziger (Astana).
Weening afrontó el kilómetro final, ya en llano, con suficiente ventaja para ganar en solitario con ocho segundos de ventaja sobre sus perseguidores, donde ya no estaba Millar, que cedió casi tres minutos, por lo que el del Rabobank se llevó el doble premio del día con la 'maglia rosa', con dos segundos de ventaja sobre el italiano Marco Pinotti y el bielorruso Kanstantsin Sivtsov, ambos del HTC-Highroad. Para el holandés fue su segunda victoria en una 'grande' tras la de la octava etapa del Tour de Francia de 2005.
Este jueves se disputará la sexta etapa de este Giro de Italia, con un recorrido de 216 kilómetros entre las localidades de Orvieto y Fiuggi, con otro final cuesta arriba.