El alcalde de Benidorm, Antonio Pérez, junto a los campeones de España de ciclocross, Felipe Orts y Lucía González, en la presentación en Madrid de la Copa del Mundo de ciclocross Benidorm 2023. - PRENSA MOMPARLER CYCLING
MADRID, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Benidorm, Antonio Pérez, afirmó que la ciudad es "turismo, sol y playa", pero que ofrece "mucho más" y confía en que la prueba de la Copa del Mundo de ciclocross en 2023 pueda "tener continuidad" para aprovechar su escaparate en países como Alemania, Francia, Países Bajos y Bélgica.
"Benidorm tiene vocación de organización de eventos deportivos y creo que podemos encajar en esta prueba. Nos gusta el ciclocross, la ciudad está volcada con el ciclismo y puede tener esta continuidad", manifestó en la presentación de Benidorm 2023 en la sede del Consejo Superior de Deportes (CSD) en Madrid.
Antonio Pérez identificó cuál es el ADN de la Capital de la Costa Blanca. "Somos turismo, sol y playa, ese es nuestro carné, pero ofrecemos mucho más. No hay destinos globales como Benidorm. La movilidad de la propia ciudad permite que se pueda combinar cualquier uso de nuestras playas, la oferta hotelera y los parques temáticos con la práctica deportiva", explicó.
En este sentido, destacó la importancia de albergar la prueba de la Copa del Mundo de ciclocross. "Hay una gran herramienta promocional en países como Francia, Holanda, Bélgica y Alemania, en los que Benidorm vuelca mucho su promoción. Tenemos un gran destino, con una climatología envidiable y una oferta incomparable y un sol que va a hacer que disfruten también los que acudan a la prueba", subrayó.
Este campeonato será para Benidorm "una ventana al mundo" que le permite "ir sellando" algo que en la ciudad es, para el primer edil, una "realidad". "Una ciudad compacta, sostenible, que protege el territorio, donde más del 50 por ciento es suelo protegido y en el que estamos creando enclaves para la práctica deportiva en los que el ciclismo va a tener un espacio libre para la práctica", señaló.
Por otro lado, celebró que Benidorm tenga ya el 90 por ciento de los hoteles abiertos y que hayan registrado una ocupación del 80 por ciento en el fin de semana previa al inicio de la Semana Santa. "Estamos recuperándonos como pensábamos. Cuando parece que la pandemia pasaba a un segundo plano aparece la guerra en Ucrania, que daña a la población, y nos ponen a prueba a los grandes destinos. Pero hemos demostrado que las personas necesitan viajar. Estamos en números similares a los de la Semana Santa de 2019", informó.