MILÁN (ITALIA), 7 Jun. (EP/AP) -
El ciclista belga Franck Vandenbroucke (Acqua e Sapone-Caffé Mokambo), que se encuentra ingresado en un hospital de la localidad italiana de Magenta, tras haber intentado suicidarse, está fuera de peligro, según explicó el director de su equipo, Palmiro Masciarelli.
Desde el hospital Fornaroli se asegura que su vida no corre peligro, aunque, por motivos de privacidad eludieron dar detalles sobre el intento de suicidio.
Sin embargo, Masciarelli desveló que el ciclista apenas se había producido unos "cortes inofensivos" en su brazo y que había hablado con él y se encontraba bien. Además, explicó que el corredor estaba deprimido porque su mujer le había dejado.
El corredor, de 32 años de edad y considerado antaño como una de las esperanzas de ciclismo de su país, no vence en una carrera desde que se impusiese en la prestigiosa Lieja-Bastoña-Lieja de 1999. Debería haber competido en el último Giro, pero se dio de baja por problemas en su rodilla.
Vandenbroucke había sufrido procesos depresivos en años anteriores por los que tuvo que ser hospitalizado y se había envuelto en tramas de dopaje después de que en el año 2002 la policía belga encontrase en su casa sustancias dopantes.
