MADRID 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, destacó el entendimiento y el clima de colaboración con los responsables del Consejo General de Colegios Médicos, con los que mantuvo hoy un encuentro en la sede del Consejo Superior de Deportes, en torno al Proyecto de Ley Orgánica de la Salud y de Lucha contra del Dopaje y que será ratificado en las próximas fechas con la firma de un convenio.
Un apoyo que Lissavetzky calificó "de clave" en la aplicación de una futura Ley para la que el secretario de Estado afirmó busca "el mayor consenso social" antes de su definitiva aprobación y es que recordó que "no hay peor ley que la que luego no se puede aplicar".
"Una parte importante de la ley reside en la aplicación de la misma por parte de los médicos y en que estén de acuerdo con lo que hemos redactado", añadió el presidente del CSD, quien apuntó que habían escuchado todas las sugerencias de la organización médica colegial para que no diese la "sensación de que ante esta ley los médicos se encuentran en una situación de desasosiego".
El vicepresidente del Consejo General de Colegios de Médicos, Manuel Sánchez Garcia, y el secretario general del mismo, Juan José Rodríguez, destacaron el clima de colaboración y el hecho de que al cuerpo médico se le haya solicitado su participación en la elaboración de esta ley.
El propio Rodríguez reconoció que, aunque el objetivo inicial del CSD y el Colegio de Médicos era el mismo de "preservar la salud de los ciudadanos que hacen deporte", sí que existieron algunas diferencias de interpretación que se han conseguido subsanar.
Así aseguró, que se trabajó en "acotar las sanciones que podía ser injustas en el caso de decomisos" y en relación con el contenido de los botiquines médicos dijo que se llevará un "control cuantitativo y cualitativo", porque defendió que en el ejercicio profesional se pudiese contar con sustancias dopantes para atender a otro tipo de urgencias.
"Nuestra intención no es dopar a nadie. La palabra dopaje suena muy dura y hemos aportado sugerencias para evitar problemas a los profesionales que trabajan de buena fe. Nos vamos a mojar para decir que sustancias entendemos pueden aparecer en un botiquín y en que cantidad", añadió.
Lissavetzky aseguró que el contenido de los botiquines estarán controlados por "un principio de proporcionalidad" y que se trata de no "generar una situación ambigua y de que la profesión médica no se encuentre en el punto de mira".
Además, el secretario de Estado para el Deporte aseguró que, para ayudar a estos profesionales, en los prospectos de los distintos medicamentos "aparecerá la máxima información y si éstos pueden tener efectos dopantes o no".
Un respaldo a la nueva ley que será ratificado en las próximas fechas por la firma de un convenio en el que se ofrecerá asesoramiento de la organización médica colegial en el desarrollo reglamentario de la ley o se impulsara jornadas y canales de información.
Un nuevo paso en un proyecto de Ley que se encuentra en su tramo final y que el Consejo de Ministros debe aprobar durante el mes de marzo antes de su paso al Congreso donde, en condiciones normales, su tramitación debería llegar antes de la conclusión del presente año.