ZARAGOZA 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, y el teniente de alcalde de Urbanismo, Antonio Gaspar, rubricaron hoy, con la empresa Isolux-Corsan Concesiones, el contrato de obras de la nueva plaza y del estacionamiento subterráneo de La Romareda, que asume a pesar de la paralización de la construcción del nuevo estadio de fútbol.
El pasado mes de marzo se resolvió el concurso público para la adjudicación de las obras de la nueva plaza de la Romareda y construcción y explotación de un aparcamiento subterráneo para 1.200 plazas. Isolux-Corsan asume la obra sin coste económico para el Ayuntamiento a cambio de la explotación del aparcamiento, durante un periodo de concesión de la misma de 35 años.
El plazo de ejecución de las obras será de trece meses y durante el verano se afrontarán las obras que mayores afecciones de tráfico causen. La construcción de la nueva plaza diseñada por el estudio madrileño de arquitectura Cano Lasso dotará a la ciudad de un nuevo espacio de centralidad en el distrito Universidad, con una gran plaza peatonal de más de 25.000 metros cuadrados. La nueva plaza de la Romareda contará con pavimentos de alta calidad, fuentes y estanques, arbolado y jardines, áreas de descanso, juegos infantiles, varios quioscos y una nueva biblioteca municipal.
El director de la empresa concesionaria, Fernando Pina, en rueda de prensa tras la firma del contrato aseguró que siguen viendo el proyecto "muy interesante", a pesar de la ausencia de los 12.000 metros cuadrados de superficie comercial que suponía el nuevo estadio.
Por su parte, el teniente de alcalde de Urbanismo apuntó que la construcción del nuevo estadio, paralizado por orden judicial, se aplaza en el tiempo "pero se hará porque todo sigue como estaba previsto". Para el teniente de alcalde, la importancia de esta obra es que se van a "conquistar" para el uso ciudadano 25.000 metros cuadrados, una superficie similar a la de la plaza del Pilar, que van a dotar a La Romareda de "uno de los múltiples centros estratégicos" con que contará Zaragoza en 2008.
Además, Gaspar señaló que es un proyecto "independiente" aunque complementario del nuevo estadio que implicaba la creación de un área de diseño en la zona, que "con el tiempo se completará", ya que la paralización del estadio lo que hace es "simplificar las obras".
La nueva plaza que se creará junto al Auditorio y La Romareda será una plataforma de gran magnitud. La nueva plaza será un plano sin interrupciones hasta las edificaciones de sus límites. Un plano de pavimentos en el que emergerán piezas técnicas funcionales (lucernarios, ventilaciones naturales o tomas y extracciones de instalaciones) con un tratamiento de pureza geométrica y combinarán transparencia y opacidad (vidrio y acero).
También se situarán estratégicamente en ella, edificaciones de distintos tamaños construidos con vidrio, metal y madera destinadas a quioscos para diversos usos y que se dispondrán transversalmente al eje principal de recorrido con el objetivo de generar un flujo y permeabilidad máxima entre los dos límites de edificaciones.
Los pavimentos serán de hormigón elaborado in situ con tratamientos superficiales diversos, y con estudiados despieces geométricos que permitan ranuras de luz en la cubierta del aparcamiento. El hormigón se combinará con piedra de Calatorao o basáltica y fajeados de piedra de Colmenar u otra caliza clara. En las zonas aledañas a los quioscos se colocarán pavimentos de madera de Teka o Sucupira o palastros metálicos que podrían estar protegidos del sol con pérgolas vegetales o toldos.
Láminas de agua en movimiento estarán también presentes a lo largo de todo el salón urbano como un manantial-estanque de cubos de materia, agua y luz que establecerá un límite-filtro con la calle de Jerusalén y otro estanque finalizador con agua en movimiento en el límite de Violante de Hungría.
El arbolado de hoja caduca ocupará la zona no vaciada del aparcamiento y se colocarán de forma aislada algunos árboles nobles de hoja perenne como magnolias u otro árbol peculiar, además de tiras de arbustos de flor olorosa que se insertarán en composiciones geométricas en el propio pavimento.