BILBAO 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El jugador del Athletic Club Andoni Iraola asumió hoy, tras la abultada derrota (1-4) encajada ante el Atlético de Madrid, que los propios jugadores son los que deben "encauzar esta situación" que, pese a ser muy delicada, "no es irreversible".
El lateral rojiblanco, titular anoche en San Mamés, reconoció encontrarse "mal", y afirmó que "el partido de ayer duele porque fue en San Mamés".
"No esperábamos que las cosas salieron así. Pero lo que no podemos ahora es agachar la cabeza. Hay que seguir con esto porque no hay más solución. Nosotros somos los que debemos encauzar esto. La única forma de poder dar la vuelta a esta situación es en el verde, jugando al fútbol intentando dar un nivel mejor del que hemos dado en los tres partidos. No tenemos otro medio", apuntó.
El de Usurbil considera que son muchos los aspectos a mejorar por el Athletic, y no sólo el de "la garra" que siempre ha caracterizado al equipo bilbaíno. "Creo que debemos mejorar, tanto en ese aspecto como en muchos otros. Nos tenemos que proteger más entre nosotros, nos debemos ayudar más; no podemos entrar en luchas individuales contra tu par y olvidarnos del resto. Al final nos tenemos que arropar más. Creo que ese es el punto de partida", subrayó.
Sobre la reacción que tuvo ayer la grada de San Mamés, Iraola admitió que no pueden "pedirle nada". "Bastantes problemas tenemos en el campo como para empezar a pedirle algo a la gente". Y reconoció que los jugadores estuvieron "más pendientes de los problemas" que les estaba dando el Atlético, al que ayer dieron "demasiadas facilidades, y no tanto del ambiente" de la Catedral.
CRITICA PERO NO IRREVERSIBLE.
Iraola tiene claro que los jugadores no deben "perder la confianza" en sí mismos, ni "caer en la desesperación" porque, a su entender, "aunque han sido tres partidos malos, no es una situación irreversible". "Tenemos que pensar que ésta es la tercera jornada, que todavía estamos a tiempo de dar la vuelta a esta situación y no pensar más allá".
De la misma opinión era el portero Dani Aranzubia, que hoy cumple 27 años, y para quien aún hay "mucho margen de maniobra y mucho tiempo".
"Está claro que hay pesimismo porque hemos jugado tres partidos y aún no hemos ganado. Parece una situación crítica y está claro que el equipo está mal y hay que buscar soluciones, pero por otro lado también hay que asumir que sólo han pasado tres partidos. Esto no ha hecho nada más que empezar, y ganando en Getafe estaríamos en mitad de la tabla", afirmó optimista.
UN EQUIPO ROTO.
El guardameta riojano reconoció que la derrota de ayer fue "un fuerte varapalo" al que el equipo trata de "buscar explicaciones, pero sin llegar "a una conclusión clara". "Está claro que no estuvimos bien, como tampoco lo estuvimos contra el Sevilla y contra la Real, y al final acabas encajando goles", admitió Aranzubia, que con el 0-2, "la gente de arriba intentó ir más a la desesperada y la gente de atrás se metió más atrás para evitar encajar más goles" y al final "el equipo acabó por romperse" y terminó recibiendo dos goles más.
Sobre la respuesta del público ayer, el de Fuenmayor reconoció que "la afición no puede estar aguantando mucho más tiempo así". "Nos pita ahora porque ve que todavía hay tiempo para maniobrar", concluyó.