ZARAGOZA 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, calificó hoy de "graves" los incidentes ocurridos el jueves de la semana pasada en el Vicente Calderón en el partido que enfrentó al Atlético de Madrid con el Sevilla, y que tuvo que suspenderse unos minutos al caer al campo de juego varios objetos, entre ellos una botella de whisky.
"Fueron unos incidentes graves que no podemos permitir en el fútbol español", afirmó Lissavetzky, quien valoró positivamente que el presidente del club "esté actuando de manera decidida; hay que felicitarle" porque se ha comprometido "a que si se localiza a los autores de los incidentes --hay unas cámaras de vigilancia que espero que funcionen bien--, les va a sancionar con la expulsión, si son socios".
Respecto al anuncio de sanción por parte del Comité de Competición, el secretario de Estado para el Deporte explicó que se trata de una decisión "que no es definitiva" y recordó que hoy hay una reunión para abordar este tema de la Comisión Nacional Antiviolencia.
Lissavetzky argumentó al respecto la necesidad de que exista una ley como la presentada por el Gobierno que está en fase de anteproyecto y a la espera de recibir el informe del Consejo de Estado y de la Agencia de Protección de Datos. Se trata del anteproyecto de Ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
El secretario de Estado para el Deporte señaló que la ley se podrá tramitar este año en el Congreso de los Diputados y explicó que el texto es "claro, aplicable y rotundo", con el objetivo de haya una "tolerancia cero" hacia la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
El texto incluye la posibilidad de eliminar la sanción al club si éste colabora en la detección de los protagonistas de incidentes. Además, hay otras medidas para conseguir que afloren los grupos 'ultras', como los libros de registro de seguidores y sanciones a las páginas web de estos grupos si contienen mensajes racistas, xenófobos o violentos, explicó Lissavetzky.
También hace referencia a la penalización de los hechos que se produzcan en los aledaños del campo de fútbol y en los transportes al estadio; considera como conducta violenta las declaraciones que generen "ambiente hostil"; elimina barreras "para que todo ciudadano extranjero pueda participar en competiciones deportivas no profesionales, cosa que todavía no ocurre", dijo el secretario de Estado; y aumenta el rigor en las sanciones.
Esta ley será, según Jaime Lissavetzky, "un revulsivo importante" y hace de España el primer país con un anteproyecto de estas características después de las medidas propuestas por la FIFA y tras la declaración del Parlamento europeo sobre este tema.
El secretario de Estado argumentó que "el deporte es algo que une y no que separa; sus valores son inmensos y queremos proyectarlos a la sociedad". No obstante, reconoció la existencia dentro del fútbol de "brotes de racismo y xenofobia" que "tenemos que erradicar" porque "es de justicia" y, además, "no nos interesa dar una imagen que no es la real del conjunto de España".
El secretario de Estado para el Deporte realizó estas declaraciones en rueda de prensa con motivo de la celebración en Zaragoza de una reunión de los directores generales de Deporte de todas las comunidades autónomas.
En este encuentro, los responsables deportivos aprobaron la realización de un encuentro nacional de coordinación de los responsables de la antiviolencia de las comunidades autónomas. Jaime Lissavetzky explicó que en él se "aunarán criterios" y la Comisión Nacional Antiviolencia emitirá sus opiniones.
El secretario de Estado se refirió a la necesidad de esta reunión porque no sólo hay problema en el fútbol profesional sino que "a otros niveles también están sucediendo algunas actuaciones violentas y es razonable que celebremos este encuentro", aclaró.
DOPAJE
En otro orden de cosas, Jaime Lissavetzky se refirió al proyecto de ley de protección de la salud y la lucha contra el dopaje en el deporte que ya se ha remitido al Congreso, y explicó que cuenta con el apoyo de deportistas, médicos y representantes del mundo universitario relacionado con esta materia.
En concreto, ha recibido el visto bueno del Consejo General de Colegios de Médicos de España, de las asociaciones de deportistas de fútbol, baloncesto, fútbol sala, balonmano y de ciclismo, y del colectivo de facultades de la Actividad Física y del Deporte de España, con las que mañana se firmará un convenio, como ya se ha hecho con los deportistas, sobre los que comentó que "es muy importante tenerlos a favor" en una ley de estas características.
Jaime Lissavetzky reclamó que "este consenso social se traslade al consenso político". Asimismo, manifestó su deseo de que "a lo largo de este año la ley esté aprobada". Esto supondrá que "España se ponga en la vanguardia internacional" en esta materia. Agregó que esta legislación "será muy útil para las comunidades autónomas".