ROMA 1 Jun. (EP/AP) -
El presidente del Lazio, Claudio Lotito, fue interrogado ayer durante seis horas por la Fiscalía de Nápoles acerca de la polémica sobre la compra de partidos y el soborno a los árbitros que sacude estas semanas a la Liga italiana.
Lotito es acusado de fraude después de que su nombre fuera asociado a la supuestas compra de árbitros para favorecer a su equipo en una serie de escuchas telefónicas interceptadas durante la temporada 2004-2005, según señalaron algunas agencias de noticias italianas.
Sin embargo, el dirigente ha negado su implicación y señaló a los periodistas que estaba "sereno" al abandonar las dependencias policiales porque era inocente de los cargos que se le imputaban.
El 'calcio' está enmarcado en un escándalo sobre el soborno a los árbitros y la supuesta manipulación de resultados durante las últimas semanas, que ha afectado directamente a clubes como la Juventus, que podría perder su último 'Scudetto', y que ha salpicado a otros como el Lazio, el AC Milan o la Fiorentina.