Fútbol/Primera.- Los jugadores desatan su euforia en el césped del Bernabéu ante la algarabía de la afición

La grada se acuerda de Eto'o y su famoso 'saluda al campeón'

Europa Press Deportes
Actualizado: lunes, 18 junio 2007 2:19

MADRID, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los jugadores del Real Madrid disfrutaron sobre el césped del estadio Santiago Bernabéu de la consecución del título de Liga, el trigésimo en la historia del club, y de la fiesta montada después de que se consiguiera vencer al Mallorca (3-1), portando banderas del Real Madrid, de España e incluso de Brasil.

Los futbolistas iniciaron los festejos en el fondo sur del estadio, antes de iniciar la correspondiente vuelta al Santiago Bernabéu, mientras el 'speaker' trataba de captar la atención de todos los aficionados, instándoles a levantar un 'tifo' plateado cuando las luces del estadio se apagaban y sonaba la potente megafonía del estadio.

Diarra, que había sufrido una semana difícil con su viaje a Mali y que fue objeto de las iras del público antes de que aportara su granito de arena en el segundo tanto madridista, y Robinho fueron algunos de los jugadores que mostraron mayor efusividad sobre el césped al grito de 'campeones, campeones' que entonaba la afición, que se acordó igualmente del polémico lema iniciado en su día por Luis Figo y continuado por Eto'o de 'saluda al campeón'.

Los jugadores disfrutaron con el 'trenecito' y volcándose en plancha sobre los fondos mientras se preparaba la fiesta organizada por el club, que mostró sobre el césped unas grandes lonas blancas por cada una de las treinta Ligas en la historia de la entidad. El 'speaker' jaleaba a la afición a cantar con cada una de las Ligas representadas por los 'telones' blancos.

Posteriormente el 'speaker' pasó a nombrar a cada uno de los jugadores que hacían acto de aparición hasta el centro del campo mientras la afición les aclamaba. Uno de los que más cariño recibió fue el capitán Raúl González Blanco, así como Iker Casillas. Para el final se reservaron cuatro de los jugadores que no seguirán la próxima temporada y que se despidieron de la mejor manera posible.

Pavón y Miñambres recibieron el aplauso de la grada y seguidamente David Beckham, en su adiós al coliseo merengue y que salió acompañado de sus tres hijos. Por último, Roberto Carlos, con un palmarés increíble, y que se marcha diez años después de la misma forma que llegó, con un título de Liga a las órdenes de Capello.

Por último, los jugadores volvieron a dar una nueva vuelta al estadio bajo el himno que suena en la Liga de Campeones, con Robinho exaltado, Beckham con sus hijos, los veteranos Míchel Salgado y Helguera con rostros sumamente feliz, y la afición deseosa de entregar el título a la diosa Cibeles y desatar toda su euforia.

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