VALENCIA, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Valencia Quique Sánchez Flores se toma el partido del próximo domingo contra el Barcelona en el Camp Nou como "un examen puntual de principio de curso que dirá si el Valencia está preparado para el máximo nivel".
El técnico destacó que el enfrentamiento "no será definitivo, ni en lo positivo ni en lo negativo". "A todos nos gustaría ganar y nos vendría muy bien, pero si no sale como queremos tampoco es una tragedia", adelantó.
El preparador se deshizo en elogios hacia el equipo que entrena Frank Rijkaard. "Es un equipo referente en el panorama Mundial porque enarbola bien la bandera del fútbol ofensivo", apuntó. Quique Sánchez manifestó que el Barcelona cuenta con "futbolistas comprometidos con las ideas de su entrenador y es hermoso verlo jugar". "Sabemos de la dificultad y más como local porque la creatividad se multiplica", recordó.
El entrenador comentó esta semana que dentro de poco se quiere quitar la etiqueta de entrenador defensivo. De todas formas no cree que "sea el Camp Nou el lugar para jugar de tú a tú al Barcelona". "No hay que perder de vista la raíz del Valencia, un equipo que sabe a lo que juega", señaló.
El valencianista considera que el Barcelona-Valencia del domingo "puede ser el mejor partido que se puede ver en esto momentos porque hay respeto por el Valencia y admiración por el Barcelona". El técnico adelantó que su equipo "le quiere dar intensidad y compromiso a ese partido donde el resultado puede ser cuestión de detalles o matices pequeños".
INTUYE UN PARTIDO ATRACTIVO.
El madrileño intuye un "partido muy veloz, de mucho ritmo y donde se peleará la pelota palmo a palmo". Quique se atrevió a aventurar que "habrá bastante posibilidades de llegada por lo que será un enfrentamiento muy atractivo".
El técnico afirmó que el Valencia intentará hacer "buen partido", pero antes habrá que ver "qué partido nos encontramos". "Estamos preparados para llevar el juego a lo que pretendemos y también para la adversidad", explicó. Quique reconoció que debido a la calidad de los jugadores que habrá en el césped "hay mucho margen para la improvisación y es difícil atarlo todo".
El Valencia se ha convertido en un equipo incómodo para el Barcelona ya que lleva cinco temporadas sin perder en la Ciudad Condal. "Somos dos equipos con un contraste muy grande, el Barcelona basado en el acierto individual y en la generación espacios, mientras que el Valencia sabemos cerrar espacios y aprovecharlos", explicó.
Quique reconoció que la disputa de la segunda jornada de la Liga de Campeones contra la Roma "sí condiciona la alineación del domingo". Además subrayó que quiere llegar al parón "con una buena sensación general".
El entrenador no podrá contar con Marchena para el domingo y del que dijo que es "un jugador muy importante y al que se necesita mucho". "Le deseamos una pronta recuperación", añadió. Al que sí que recupera es a Albelda que por lo visto en los entrenamiento "sí que puede jugar y lo hará al cien por cien chocando como lo ha hecho siempre",, concluyó.
