NYON 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Antidopaje de la UEFA presentó hoy su informe de la temporada pasada, en la que se realizaron un total de 1.348 controles de los cuales sólo hubo siete casos positivos, casi todos en categorías inferiores y por "drogas sociales".
El número total de controles se ha incrementado en un cien por cien y por primera vez se realizaron tests fuera de la competición en la Liga de Campeones. En total, 423 jugadores de los 32 equipos participantes fueron sometidos en 43 controles fuera de la competición, y todas las pruebas fueron negativas.
Además, 361 jugadores fueron sometidos a las pruebas para revelar si tenía EPO en su sangre, también sin positivos. Sin embargo, el número de positivos se elevó a siete, dos más que en la campaña 2004/05. De esos casos, dos fueron por cánabis en categorías sub-19, dos por cocaína en los sub-17, dos por beta2 en fútbol femenino para tratar el asma y el último por esteroides en la Copa de la UEFA.
El presidente de la comisión antidopaje, el doctor Jacques Liénard, considera que los controles realizados han tenido un efecto disuasorio. "Sin embargo, lamento que este tipo de droga social esté presente en nuestro deporte", añadió.