MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
El jugador del Athletic de Bilbao Andoni Iraola ha advertido que el equipo deberá cambiar "el chip" de cara al partido ante el Celta del próximo fin de semana, correspondiente al encuentro de octavos de final de la Copa del Rey, ya que es una competición que no puedes afrontar de la misma manera que los de Liga ya que no te permite tener un día "malo".
"La Copa es una competición especial para nosotros, es distinta porque no te permite tener un día malo. Y este año la empezamos con un rival de Primera división, el Celta, ante quien deberemos cambiar el chip. No podemos afrontarlo igual que un partido de Liga", afirmó este miércoles durante la rueda de prensa.
Asimismo, aseguró que el conjunto vigués es un equipo que ha tenido "un poco de todo", tanto partidos espectaculares como otros "mucho más flojos". "Es la imagen de su entrenador. Tener la posesión, sacar el balón desde atrás... Tenemos que luchar mucho y no dejarles sentirse cómodos", explicó.
"Aunque vayas perdiendo, y veas que es difícil revertir el partido, hay que pelear hasta al final. Son 180 minutos, sabemos que los goles fuera son importantes. Queremos ir el sábado y poner la eliminatoria a favor de cara al partido de vuelta", reconoció.
Asimismo, apuntó que, a pesar del buen momento de forma que atraviesa el conjunto bilbaíno, sacar pecho a estas alturas de la temporada "sería un error". "Aún no hemos llegado ni a la mitad. Llevamos 15 partidos y, si queremos conseguir algo, aún tenemos que ganar muchos puntos", comentó.
"En general, el equipo últimamente está bien, pero no solo en el tema físico, sino en todo lo demás: táctica y anímicamente. Sobre todo, en la segundas partes, se nota que estamos mejor que el resto de los equipos. Al final, cuando salen las cosas, físicamente parece que está todo bien. Y si pierdes, parece que estás hecho polvo", añadió.
El lateral derecho, que este miércoles anunció su renovación por una temporada más con el club rojiblanco, se mostró "muy contento y agradecido" con la entidad por darle la oportunidad de seguir. "Estoy deseando que las cosas vayan en la buena línea como hasta ahora", dijo.
Sobre el hecho de renovar por solo un año, el defensa explicó que siempre ha sido partidario de los "contratos cortos". "Los últimos habían sido de dos temporadas. Ya vamos cumpliendo años, y me siento más cómodo renovando temporada a temporada", explicó.
"Ha sido una negociación normal. Llevo muchos años aquí, he tenido esa suerte y también es verdad que he contando con la confianza de los técnicos que he tenido, en general todos buenos entrenadores. Es una señal de que vamos para arriba", reconoció.
Además, admitió que no se ha hecho planes a largo plazo, y declaró que, una vez cumplido el año de contrato, ya se verá "qué pasa". "Lo que va a marcar mi futuro va a ser el rendimiento, con el que la gente y el entrenador esté contento. Eso es en lo que me tengo que central únicamente", agregó.
El guipuzcoano, que confesó que nunca se vio con "otra camiseta", afirmó que no tiene en la cabeza la posibilidad de ir con la selección española para el Mundial de Brasil. "Mi preocupación es dar un buen rendimiento aquí, lo demás no me quita mucho el sueño", concluyó.
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