MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
El defensa del Real Madrid Raúl Bravo dejó claro que el "último y único objetivo" del club es quedar segundos para conseguir la plaza directa para la próxima Liga de Campeones y que, aunque esa meta no sea tan atractiva como un título, "la motivación debe ser máxima".
"El objetivo es ser segundos para ir a la Copa de Europa, el último y único objetivo del club este año es quedar segundo. Esa es la motivación que tenemos que tener, a todos nos gusta tener más vacaciones y no depender de un partido para ir o no a la Copa de Europa, la motivación debe ser máxima", recalcó.
Además, no quiere mirar a la presión de Valencia, Osasuna u otros rivales. "Debemos preocuparnos por nosotros y por sacar el mayor número de puntos posibles. Si nos ponemos las pilas y hacemos las cosas bien no tenemos que pensar en quién es más peligroso. Quedan seis partidos y hay que ir a por los seis, si luego son cinco, buenos serán", expresó.
Reconoce que el equipo "está creando dudas", pero confía en hacer un buen esprint final para lograr los objetivos y evitar contratiempos en el verano. "Hemos tenido partidos para sumar puntos en principio fáciles y no los hemos conseguido. Esa irregularidad es la que no tenemos que tener. Lo importante es la regularidad en todas las jornadas, no sólo en esta. Hay que encontrar el nivel, aunque sea para terminar el año y estar un poco tranquilos en la segunda plaza", deseó.
El primer rival, el Getafe, no le pondrá las cosas nada fácil a los blancos, que no quieren ir al Coliseum como favoritos: "Viniendo de donde venimos sería un error pensar eso, aunque mirando la clasificación, sí. Pero el cartel de favorito sólo perjudica al que se le cuelga".
"Es un campo difícil, el año pasado ya nos marcó un poco la trayectoria (2-1) y tenemos que buscar el juego de semanas anteriores y coger la mínima diferencia que teníamos con el resto de perseguidores. El Getafe viene haciendo una gran campaña y va a ser un rival muy difícil", avisó.
Asegura que los jugadores no pueden ni deben pensar en las posibles altas y bajas a final de temporada --"cada uno sabe para lo que está aquí, nos estamos jugando bastante y no tenemos que pensar en eso"--, al tiempo que elude polémicas sobre la reunión programada por Fernando Martín para el pasado lunes.
"Las decisiones del presidente hay que aceptarlas, por aguantar unas horas... luego se dio un poco más libre de lo que estaba previsto y todo arreglado. Decidió reunirnos para comentarnos la situación y nada más, tampoco fue una cosa de sermón ni nada", dijo.
Si embargo, al ser cuestionado sobre si el equipo no sabía como es la situación, el valenciano no quiso meterse en problema. "Sí lo sabíamos..., ¿que queréis que diga?. Alguna explicación tiene (la reunión), alguna tendrá lo que se habló, todo el mundo ha sacado algo bueno", dijo.
"No voy a opinar sobre si pecó de novato o no, las decisiones del presidente hay que aceptarlas y si pensó que era bueno reunirnos pues será bueno", sentenció.
