MADRID, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
El delantero y capitán del Real Madrid, Raúl González, reconoció hoy que ayer sintieron "impotencia" durante el partido ante el Alcorcón, pero recalcó que deben "mirar al futuro con optimismo" y que hay que tener confianza en Manuel Pellegrini, al que ve "capacitado para sacar esto adelante".
"En esta eliminatoria no hemos dado la imagen que todos esperábamos. Hemos sufrido una gran decepción, sobre todo para nuestros aficionados, y es un palo muy duro que hay que asumir y aceptar y que sea un punto de partida para hacer las cosas mucho mejor porque creo que este grupo tiene margen de mejora para pelear por los títulos importantes y aún nos quedan dos", comentó Raúl en rueda de prensa.
El atacante, que cree que la plantilla está "capacitada para salir de este duro golpe", pero que debe ponerse "las pilas", lo pasó ayer mal. "Sentimos mucha impotencia. El equipo salió con buena actitud y sabía que lo difícil conseguir el primer gol y cuando no llega, hay más ansiedad", apuntó.
Además, alabó al Alcorcón que "hizo su partido y no se descompuso", mientras que el Real Madrid no tuvo "ni fluidez ni ideas claras". "Según pasaban los minutos te queda esa frustración. Fue un resultado malo y una imagen mala, y lo tenemos que asumir individual y colectivamente", prosiguió.
El jugador madridista insistió en que "no hay elementos externos" que les perturben y respecto a la eliminatoria contra el Alcorcón, opinó que hay cosas que no se "explican". "En la ida fueron superiores y aprovecharon sus ocasiones, y en global fueron mejores. A lo mejor todo habría cambiado si hubiésemos marcado alguna al principio porque nos habría dado confianza, pero no hubo fluidez y ellos estuvieron bien colocados", destacó.
De todos modos, el '7' blanco advirtió que en "los proyectos nuevos es complicado que salga todo bien". "Hemos jugado algunos partidos bien, otros que no tan bien. Éste es un equipo en progresión con muchos jugadores nuevos y se necesita un tiempo de adaptación, que a lo mejor está siendo demasiado largo. Tenemos que seguir trabajando y tener plena confianza en el entrenador y en los compañeros. No tenemos que bajar los brazos", resaltó.
En este sentido, y tras los pitos y los gritos recibidos en contra de Manuel Pellegrini, Raúl recordó que "a lo largo de la historia del Real Madrid ha habido situaciones complicadas" y que "cuando el equipo no juega bien, no hay un culpable".
"Hemos sido todos y seguimos teniendo fe en el entrenador y su trabajo. Le veo capacitado para sacar esto adelante, y ayer el público mostró su desilusión, pero creo que nos sentíamos todos partícipes de que las cosas no nos estaban saliendo bien, pero no por culpa del entrenador", añadió.
"SABÍA QUE ESTE AÑO IBA A SER COMPLICADO PARA MÍ".
Por otro lado, aseguró que su seriedad hoy en la sala de prensa era lo normal. "Serio tienes que estar cuando no juegas, si no mejor irse a casa. Yo no he descansado esta noche y no estoy para muchas fiestas", subrayó, aunque aclaró que no tenía que ver con su falta de participación en los últimos partidos. "No tengo problema en aceptar estas situaciones y ya sabía que este año iba a ser complicado en el que iba a participar mucho menos, pero lo importante es el colectivo", reiteró.
"Yo seguiré trabajando y haciendo las cosas como siempre, por eso llevo 15 años aquí. Esto es una decisión del entrenador y lo más importante es estar en mejores condiciones por si te requiere el entrenador. Estoy seguro que jugaré", prosiguió, puntualizando que ya era "antes titular". "Somos un grupo que todos queremos participar y ayudar y luego está el entrenador que tomas las decisiones por el bien del equipo", insistió.
Además, el delantero dejó claro que no se sentían desprotegidos por el club, en relación al 'caso Guti' o al hecho que no se alinease ayer a Sergio Ramos, pese a que podía jugar tras no reunirse el Comité de Competición, lo que calificó de "malentendido".
"Todas las partes lo van a explicar. El club ya lo hizo y el entrenador imagino que lo hará en las próximas horas, aunque no tuvo una trascendencia importante porque el equipo no fue capaz de dar la talla y nos ha eliminado un Segunda B y en muchos momentos siendo superior. Hay problemas que tenemos que solucionar y esperemos que estos días podamos recuperar esa ilusión y ganas", dijo.
Finalmente, Raúl aseveró que no van "a bajar los brazos". "Tenemos calidad, casta y orgullo y quedan siete meses de competición muy interesantes. Hay que tener optimismo para pensar en el futuro a largo plazo, estamos a un punto de la cabeza y dos partidos importantes en 'Champions'. Esta es una eliminatoria de las que duelen, pero tenemos que sacar toda nuestra fuerza", afirmó, advirtiendo que no hubo ninguna charla hoy en el entrenamiento porque no estaba la plantilla al completo.