Rijkaard: "Prefiero reservar la alegría hasta que el trabajo esté cumplido"

BARCELONA, 2 May. (EUROPA PRESS) -

El entrenador del FC Barcelona, Frank Rijkaard, mantuvo su prudencia en vísperas del partido ante el Celta de Vigo en Balaídos, que brinda a su equipo la primera posibilidad de ser campeón de Liga sin depender de otros resultados, y dijo que prefiere "reservar la alegría" hasta el alirón.

"Yo prefiero reservar la alegría hasta que el trabajo esté cumplido. Todo lo que sea anticiparse no funciona. La paciencia es importante y no me gusta hablar tanto de todo esto", declaró, después de haber respondido a muchas preguntas sobre el alirón y las posibles celebraciones.

Rijkaard, además, volvió a poner freno a la euforia y rechazó que ya pueda hablarse de un nuevo ciclo, como ha apuntado su compatriota Johan Cruyff, que opina que la final de la Liga de Campeones del próximo día 17 puede ser el principio de una gran época.

"Hay que disfrutar el momento actual y seguir trabajando. Ojalá este equipo pueda mantener el nivel durante muchos años. Entonces se podrá hablar de un ciclo, pero ahora no", afirmó. Asimismo, quiso dejar claro que no hay que "dar por hecho" que el Barça será campeón en Vigo.

EL VALOR DE LA LIGA

En vísperas de poder conseguir su segunda Liga consecutiva, Rijkaard también quiso realzar el valor de la Liga ante la mayor ilusión que genera la Liga de Campeones entre los culés y opinó que la Liga "siempre es lo más importante porque es el fruto del trabajo diario".

"Personalmente, valoro muchísimo que el equipo pueda ganar dos Ligas seguidas, es un gran objetivo para todos nosotros. Y creo que la gente estará orgullosa si ganamos otra vez la Liga, aunque todavía no está hecho y es mejor no hablar demasiado de este tema", explicó.

Rijkaard, sin embargo, ha variado el plan habitual y se lleva a Vigo a toda la plantilla --incluidos el lesionado Messi y los descartados Maxi, Ezquerro y Gabri--, a diferencia de lo ocurrido en la visita al Sevilla, porque "la diferencia es que esta vez dependemos de nosotros mismos".

"Pero no hay que darlo ya por hecho", insistió. El técnico holandés, por otra parte, restó importancia a la posibilidad de ser campeones en el descanso del partido, que pasa por que el Valencia pierda o empate en Mallorca, ya que sería "una cosa rara".

De todas maneras, dijo haber visto "casos similares una o más veces en mi vida". Durante la rueda de prensa, mostró de nuevo su ironía, sobre todo al referirse a lo "raro" del posible alirón del Barcelona por esa posibilidad de producirse en el descanso, aunque no cree que sea así.

Rijkaard destacó, ya más en serio, que el Barcelona debe jugar con la "mentalidad de salir a cumplir el trabajo" y que no le preocupa la situación que atraviesa el delantero Samuel Eto'o ni que el camerunés pueda obsesionarse con la lucha por el trofeo 'Pichichi'.

Del Celta, además, advirtió que es "muy buen equipo, tiene mucho fútbol, está bien organizado y tiene jugadores de mucha rapidez, talento y calidad". Por último, declinó extenderse sobre la final de París y el reparto de las entradas, aunque aprovechó para bromear otra vez.

El entrenador del Barcelona dijo que, "raramente", no le han pedido entradas para la final. "No tengo amigos", ironizó. Además, también comentó que lo que ahora le preocupa es el partido ante el Celta de Vigo e incluso "las entradas" del partido de mañana en el estadio de Balaídos.