El Sevilla se enfrenta al Schalke, último obstáculo para el sueño de una final continental

Actualizado: jueves, 20 abril 2006 2:01


SEVILLA, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Sevilla encara hoy ante el Schalke 04 la ida de las semifinales de la Copa de la UEFA, en la que los de Juande Ramos intentarán alcanzar el sueño de jugar, por primera vez en la historia del club, una final continental, aunque para ello deberán eliminar antes a un difícil y duro rival que ya ha liquidado a otro equipo de nuestro país, el Espanyol, este mismo año.

Se trata, de hecho, de una final anticipada entre dos de los equipos que figuraban de antemano como favoritos al título. Para el Sevilla es ésta una cita marcada por la ilusión pero también por el temor de que, una vez más, reaparezca esa maldición que siempre le deja con la miel en los labios y que le ha impedido llevar un título a sus vitrinas desde hace casi 60 años.

Por ello, los hispalenses alinearán su once de gala con la idea de arrancar un resultado que les permita sentenciar en casa, a la vuelta, y culminar una gesta que pocos podían imaginar a comienzos de temporada, cuando la era 'post-Caparrós' se perfilaba de modo traumático.

Con su principal baza ofensiva, Kanouté, recuperado de sus problemas físicos, bien secundado por un Saviola que está ofreciendo su mejor cara precisamente en Europa, la preocupación del Sevilla debe ser, por supuesto, dejar su portería a cero.

Y es que el Schalke es cualquier cosa menos una 'perita en dulce' pese a que hace más de un mes que no gana en su estadio un partido de la Bundesliga. Los 'azules reales', de hecho, han llegado a este torneo tras ser eliminados de la 'Champions' y atesoran siete campeonatos de su país, además de ganar la propia Copa de la UEFA en 1997.

Con un 4-2-3-1 como sistema de juego y entrenado por el recientemente renovado Mirko Slomka, el Schalke cuenta con nombres a tener en cuenta en todas sus líneas, aunque su gran virtud radica en una defensa sólida que comienza en el veterano portero Franck Rost, protegido por una 'guardia de corps' formada por Krstajic, el uruguayo Darío Rodríguez y el brasileño Marcelo Bordon, a los que hay que unir otro carioca, Rafinha, y al georgiano Kobiashvili en los laterales.

En el centro del campo quien manda es el internacional danés Christian Poulsen, que suena para varios de los principales clubes del continente, con la calidad de otro jugador nacido en Brasil, Lincoln, como enlace con la delantera, a la que aporta también sus goles, sobre todo a balón parado.

La tarea propiamente atacante corre a cuenta del Kevin Kuranyi, titular a buen seguro con Alemania en el ya inminente Mundial que se jugará en el país germano, aunque tampoco se puede olvidar a Gerald Asamoah, ghanés de origen aunque internacional asimismo con Alemania.

En los últimos entrenamientos, empero, se vislumbra un posible equipo muy novedoso, del que saldrían Lincoln y Kuranyi, por el que entraría como único punta Larson, su habitual suplente aunque tal vez sea una táctica para despistar.

Lo que se puede dar por seguro es que los alemanes apretarán también de lo lindo con las 60.000 gargantas que les apoyarán desde las gradas del espectacular Arena Aufschalke, aunque cientos de sevillistas han viajado también hasta Gelsenkirchen.