¿Por qué el Sevilla F.C y el Valencia han comenzado mal la Liga?

Unai Emery
ÁNGEL GUTIÉRREZ
Actualizado: jueves, 24 septiembre 2015 19:31

MADRID, 24 DE SEPTIEMBRE (EDIZIONES)

   Los resultados de uno y otro equipo están siendo decepcionantes para sus aficionados en este comienzo de liga. El Sevilla, tras 5 partidos de competición doméstica, ocupa el farolillo rojo, el último lugar de la clasificación, sin haber podido conseguir más que dos empates y ni una sola victoria. El conjunto Che, aunque ocupa la novena plaza de la tabla, solo ha conseguido una victoria y tres empates, pero su juego está dejando mucho que desear.

   Es sorprendente que dos equipos que hicieron una temporada anterior excelente, con buenos resultados y buen juego, esta temporada estén en una situación tan diferente. En el caso de los andaluces, llevan unos años practicando un juego sensacional e imponiéndose en Europa, jugando contra grandes equipos y ganando títulos. En cambio, esta temporada, en la competición de la regularidad, la liga, enfrentándose a equipos que, teóricamente, son inferiores, ha demostrado debilidad.

   Lo mismo pasa en Valencia. Se ha enfrentado a equipos a los que, en principio, debería haberse impuesto, pero no ha sido capaz. Su juego, así como el de los sevillistas, no es el mismo que tantas alegrías dio en partidos anteriores. Y los aficionados se empiezan a preocupar y a preguntar las razones de estos malos resultados.

   Ambos equipos tienen las mejores plantillas de los últimos años. Ambos equipos van, año a año, creciendo como equipo. Si estos es así, ¿cuál es la razón para justificar estos malos resultados a comienzo de temporada? La razón puede ser esta que exponemos a continuación:

   Este verano, ambos conjuntos han tenido que partidos muy importantes durante este verano. El Sevilla ha tenido que preparar la Supercopa de Europa que le enfrentó al F.C. Barcelona, una competición importante que obligó a los de Unay Emery a hacer una preparación especial. Por otro lado, El Valencia ha jugado en agosto las eliminatorias de la fase previa que daban acceso a jugar la Europa League. Muchos partidos importantes, con mucho desgaste, y que obligaron, como al Sevilla, a hacer una preparación especial.

   Esta preparación es, sobre todo, física. Todos sabemos que en una temporada tan larga, los equipos sufren altos y bajos en su condición física. Les pasa a todos y es algo que los entrenadores saben e incluso planean. Los técnicos preparan para que sus equipos estén físicamente óptimos para ciertos tramos de la temporada. Estas competiciones de las que hemos estado hablando y que han disputado tanto Valencia como Sevilla, han hecho que los jugadores llegaran en un buen estado físico a esos partidos. Pero como no se puede mantener por siempre ese estado, llega un momento en el que el físico se resiente. Y en la élite del fútbol español, no solo vale con tener grandes jugadores y mucha calidad. Si el físico no acompaña, el juego decae, y con él, pueden hacerlo los resultados.

   No es al primero ni al único que le pasa. Podemos extrapolarlo también al F.C. Barcelona. Es cierto que ha ganado todo menos un partido, pero su juego no convence. Seguramente por esta misma razón. O incluso el Athletic Club de Bilbao, que pese a hacer un buen partido contra el Real Madrid, los resultados no están siendo brillantes y también ha tenido partidos importantes este verano.

   La solución a esto es confiar. Confiar en el trabajo de los técnicos, confiar en el trabajo de los entrenadores y trabajar. No deben caer los sevillistas o valencianistas en el desaliento. Hay que confiar en estos equipos, que tienen calidad, jugadores y juego más que suficiente como para estar entre los mejores. Y eso, tarde o temprano, se verá, tanto con juego como con resultados.