Carlos Sainz se marcha de territorio mauritano con el buen sabor de un cuarto triunfo

Europa Press Deportes
Actualizado: martes, 10 enero 2006 18:52

KAYES (MALI), 10 (EUROPA PRESS)

El español Carlos Sainz (Volkswagen) se sacó la espina en la despedida del desierto mauritano, donde vio sepultadas sus aspiraciones de ganar el Rally Dakar en su debut, y se hizo con un cuarto triunfo en la décima etapa, disputada hoy entre Kifa (Mauritania) y Kayes (Malí) sobre un recorrido de 333 kilómetros, de los cuales 283 eran de especial, y que en motos fue todo un tributo al australiano Andy Caldecott.

Sainz tuvo en Mauritania los días pasados, especialmente el sábado en el que concluyó la etapa pasadas la una de la madrugada y a más de ocho horas del primero después de sufrir problemas en una rueda y con el embrague de su Touareg, un aprendizaje práctico de lo que es el Dakar, esa prueba a la que este año se acercaba con el objetivo de tomar contacto para futuras experiencias.

El bicampeón del mundo de rallys, que no se había cansado de subrayar que todo el mundo le decía que Mauritania iba a marcar el destino, para bien o para mal, de todos en este Dakar, pero que para él, lógicamente, era algo desconocido, tuvo el peor de los encuentros posibles.

Sin embargo el piloto español es de los que aprenden mucho y todos estos sufrimientos, en el caso de atreverse un año más a volver, le servirán de mucho. Ya lo demostró hoy reencontrándose con el triunfo en la que era la última cita en territorio mauritano, con llegada ya en la localidad de Malí de Kayes, con un cambio ya brutal en el terreno, acabándose sus temidas dunas y los problemas de navegación.

Sainz, con éstas, aprovechó para hacer lo que sabe hacer, y posiblemente mejor que nadie en este Dakar, pilotar lo más rápido.

Con un tiempo de 3 horas, 28 minutos y 34 segundos, aventajó en cuatro minutos y ocho segundos al también español Joan 'Nani' Roma (Mitsubishi) y en 4:58 al francés Stephane Peterhansel (Mitsubishi).

Este último aprovechó para aumentar su renta en la clasificación general sobre su compatriota Luc Alphand (Mitsubishi) a más de cuarenta minutos, acercándose así al que será su noveno triunfo en el 'raid' africano, el tercero consecutivo en coches.

Y es que Peterhansel es de los que normalmente esquiva los días malos en el desierto africano, algo prácticamente imposible de conseguir a lo largo de las dos semanas. Hoy este día malo le tocó a Alphand, que deberá conformarse un año más con escoltar en el podio a su compatriota.

El ex campeón de esquí daño la dirección de su Mitsubishi al chocar con un árbol y a partir de ahí todo fue en su contra.

Posteriormente se quedó varado en el kilómetro 218 y acabó dejándose en la jornada más de 30 minutos con Peterhansel.

'Nani' Roma, por su parte, con su segundo puesto en la etapa consiguió arañar unos valiosos minutos al sudafricano Giniel de Villiers (Volkswagen) en su objetivo por pisar el podio. De todas maneras aún le separan 32 minutos del cajón.

ÚLTIMO HOMENAJE A CALDECOTT

En motos, después de que la etapa fuese neutralizada tras el fallecimiento ayer de Andy Caldecott, la jornada se convirtió en un último homenaje de sus compañeros de fatigas al piloto australiano.

Así, el español Marc Coma (KTM) descontó una hoja del calendario en el camino hacia su sueño de llegar al Lago Rosa y convertirse en el segundo español, tras 'Nani' Roma en 2004, en lograr el triunfo en la mítica prueba.

Mañana se disputará la undécima etapa, que llevará a la caravana del Dakar desde Kayes a Bamako, sobre un recorrido total de 705 de los que 231 serán de especial.

Contenido patrocinado