MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
La selección española femenina de hockey sobre hierba logró el sueño de disputar las semifinales del Mundial de Madrid tras empatar a un gol ante Inglaterra, en un encuentro que tuvo tintes de sufrimiento en el tramo final cuando las inglesas más apretaron.
La expectativas más optimistas no hubieran esperado un resultado de semejantes connotaciones. España estará entre las cuatro mejores del mundo por la lucha por las medallas, todo un logro para el hockey hierba femenino que ahora deberá superar el obstáculo de Argentina, las actuales campeonas, o Australia para intentar igualar el sueño de Barcelona'92.
El esfuerzo demostrado día a día por las jugadoras dirigidas magistralmente por Pablo Usoz se materializó hoy sobre el campo. El afán de superación de una selección, completamente renovada, con diez componentes del equipo por debajo de los 22 años, ha servido para que España pueda iniciar una nueva época de oro para esta categoría como la que se vivió hace 14 años.
Conscientes de todo lo que se jugaban contra Inglaterra, con tan sólo un punto era suficiente, el combinado español arrancó el choque con mucha tensión, sin temer el juego de las británicas. El equipo inglés desde el inicio mostró mucho respeto a la selección, que golpeó primero a los diez minutos de partido por mediación de Montserrat Cruz, tras zafarse con habilidad de la portera rival Storry.
Sin embargo, la superioridad del equipo de Usoz se vio alterada, pese a que contó con dos 'penalti-corner' por uno de Inglaterra, ya que en el ecuador de esta primera parte, su capitana y referente en la cancha, Silvia Muñoz, tuvo que abandonar el partido por una torcedura en su tobillo izquierdo, y el combinado nacional perdió la concentración.
MINUTOS FINALES DE PADECIMIENTO.
En el segundo acto, la estrategia de la selección española se basó en una fuerte defensa, que asegurara rápidos contraataques. No obstante, el cansancio desarrollado durante todo el torneo, en especial durante el partido de ayer ante India, comenzó a hacer mella a las jugadoras nacionales, que ya en escasas ocasiones se acerca las inmediaciones de la meta británica.
Por el contrario, el acoso del equipo inglés, sin llegar a ser asfixiante, generó mucho peligro en el área española, que se defendió como pudo hasta que Mel Clewlow, mediante el primer lanzamiento de 'penalti-corner' de la segunda parte, empataba el encuentro, al superar a Rosa por debajo de las piernas.
La agonía, los nervios y la tensión se sumaron en contra de España, pero ésta tenía una cita con su historia a la que no faltó. El siguiente paso, el próximo viernes (19:00 horas) y con el objetivo de asegurar una histórica medalla.
