LONDRES, 28 Oct. (EP/AP) -
El estadio de Wembley fue hoy el testigo del primer encuentro de la NFL más allá de las fronteras de los Estados Unidos y que disputaron los Giants de Nueva York contra los Dolphins de Miami, con victoria de los primeros por un ajustado 13-10.
El espectáculo del fútbol americano congregó a una gran multitud en el mítico y remozado recinto, pero el partido se vio afectado por la continua lluvia que cayó sobre la capital inglesa y por el mal estado del césped.
El encuentro tuvo además la habitual parafernalia de la NFL, cuyo marketing funcionó a muy buen nivel entre los asistentes, que se inclinaron más hacia los 'Delfines', y antes del partido se cantaron los himnos nacionales, americano e inglés.
Entre los capitanes de honor estuvo el ex internacional del 'XV de la Rosa' Martin Johnson, extrañamente abucheado por cierto sector del público. Tampoco faltó a la cita el habitual exhibicionista, que saltó al campo en el descanso, y que animó a un público, que mostró su desacuerdo con ciertos rituales propios de la NFL, pero que aguantó en su práctica totalidad el partido.
De todas formas, los directivos de la NFL creen que el experimento no ha sido del todo malo, y el año que viene tiene previsto repetir la experiencia en México, Canadá, Alemania o quizás de nuevo en Wembley.
En el partido, los Gigantes, que llevan cinco victorias consecutivas, no estaban con mucho ánimo para hacer el viaje de 5.600 kilómetros, aunque Brandon Jacobs ayudó a que el viaje fuera un éxito al recorrer 131 yardas, la segunda semana consecutiva en que establece una marca personal en su carrera.
En total, la defensa de Nueva York solamente le permitió a los Dolphins avanzar 254 yardas, impidiéndoles llegar a la zona de anotación durante los primeros 58 minutos del encuentro.
